ANTONIO BURGOS | EL RECUADRO


Futuritis con vara de nardos

DIJE que Sevilla es una ciudad anclada en el futuro y me reafirmo en mi diagnóstico, tras tomarle el pulso en esta deliciosa primera quincena de agosto de la ciudad vacía, que se nos acaba de ir.

—Eso de primera quincena de agosto suena a alquiler de apartamento...

—Ojalá lo hubieran alquilado al menos para la primera quincena de agosto los que otros veranos lo arrendaron por meses enteros y este año se han quedado con el cartel de «Se alquila» y el teléfono 609 colgado en el balcón, como si fueran las toallas de playa, muerto de risa...

Tumbado en la arena, ante el inalterable paisaje del horizonte de la mar, la víspera de la Virgen tomé el mazo de todos los diarios que se editan en Sevilla, busqué recado de escribir en la bolsa de playa, y me dije:

—Ea, vamos a apuntar todos los titulares que hablen de futuro, para hacerle a la sangre de tinta de Sevilla el recuento y fórmula, a ver cómo andamos de la enfermedad endémica de la futuritis.

La futuritis ya saben qué es: esta enfermedad endémica de las autoridades sevillanas, que se hartan de prometernos cosas, de anunciarnos cosas, sin que luego se haga nada.

—Y sin nadie que tenga memoria para recordarles que se quedaron con el pueblo con esos anuncios de futuro.

Esa es la condición indispensable para la futuritis. Si aquí hubiera memoria o vergüenza (o ambas cosas a la vez), los políticos no se quedarían con nosotros anunciando cosas, porque la oposición o la propia sociedad civil se lo recordarían y echarían en cara si incumplían su promesa. ¿Habrán anunciado veces cosas del Metro que no se han cumplido? ¿Habrán anunciado aparcamientos subterráneos que no se hicieron? La futuritis hasta nos dio un costosísimo Estadio, llamado Olímpico, para algo que después nunca ocurrió. Así que en el butacazo playero de la mañana, tomo los periódicos y he aquí los preocupantes síntomas que me encuentro de la gravísima futuritis. Todos estos titulares venían en la prensa sevillana del 14 de agosto:

«Sevilla tendrá el mayor complejo aeronáutico de España».

«Una fundación financiará el traslado de la tumba de Colón en la Catedral».

«EADS triplicará la superficie de la fábrica aeronáutica de San Pablo».

«La A-49 sólo abrirá su tercer carril el último día de la Operación Salida».

«Las chabolas del Vacie tendrán nueva guardería en septiembre».

«El comité de empresa de Isla Mágica reclamará a las Cajas que presenten una oferta al concurso público».

«Fibes abrirá en 2010 pese a la crisis».

«Qualytel mandará al paro a cerca de 300 empleados de su sede sevillana».

«El Gobierno local mantendrá su reivindicación de más inversiones ante la Junta».

¿Cosas de la política? ¿Lo que dijo el cínico del Viejo Profesor, que las promesas son para no cumplirlas? No, de la política no: de Sevilla. Hasta en el deporte estamos aquejados de futuritis aguda. Miren qué titulares:

«El Triatlon Desafío Doñana será un evento deportivo de primer nivel».

«Lopera dará explicaciones».

«Lopera dice que no venderá a Solbes».

Cuando pasen los meses podremos comprobar que casi ninguna de esas promesas se ha cumplido. Como siempre. Bueno, sí, se ha cumplido un titular precioso, que aún está trasminando el aire de la mañana. Era 14 de agosto. Un titular decía: «Mil varas de nardos perfumarán el paso de la Virgen de los Reyes».

—¿Seguro que mil? ¿No serían ochocientas? Es que mil varas de nardos son muchas varas... Si la futuritis llega ya hasta a las cofradías, con esa locura de querer ampliar la carrera oficial y mandar a Colón donde perdió el gorro...

 

Articulos de días anteriores

Ir a página principal (Inicio) de www.antonioburgos.com

 

Para buscar dentro de El RedCuadro

 
 
  

 

Correo Correo

Clic para ir a la portada

Biografía de Antonio Burgos


 

 

Copyright © 1998 Arco del Postigo S.L. Sevilla, España. 
¿Qué puede encontrar en cada sección de El RedCuadro ?PINCHE AQUI PARA IR AL  "MAPA DE WEB"
 

 

 


 

Página principal-Inicio