ANTONIO BURGOS | EL RECUADRO


Siento envidia de Valencia

YA dije que igual que a otros les gusta jugar al golf y hacer ejercicio caminando con el carrito de los palos, lo mío es andar calles y calles de grandes superficies comerciales, arrastrando el carrito de la compra. ¿Por qué tal afición? Pues por algo así como por la de los toros: porque es una forma privilegiada de conocer a España. Si una plaza de toros es fiel reflejo del solar patrio, ni te cuento un hipermercado. Te revela hasta la psicología colectiva de una ciudad. Mientras no vayas a una gran superficie no acabas de conocer a una ciudad. Fundamentalmente, pegando la oreja. Como el queso de la vaca que ríe, en el hipermercado escuchas a la ciudad que habla, por voz de sus amas de casa. ¿De dónde se creen ustedes que Los Morancos sacan su repertorio? De pegar la oreja junto a las latas de melva canutera. Pero las grandes, las que están de oferta.

En mi afición me gustaba ir de hipermercado en hipermercado, de una cadena a otra. Pero, hijo, desde que en algunos nos castigaron sin bolsas de compra como a los niños malos los dejan sin merienda, me he aficionado a la estricta observancia de Mercadona, donde no tienes que ir con la bolsa puesta de tu casa ni con la mamarrachada del ecologismo de la puñeta te obligan a ser corredor de bolsa.

No sé cómo se dirá eso, la afición por Mercadona. Si los partidarios de Curro Romero somos curristas, los de Mercadona, el supermercado paisano de Enrique Ponce, seremos mercadonistas. Así que, padre, me acuso de que soy mercadonista. De entrada es el único hipermercado donde no te vuelves loco buscando las cosas. Por seguir con el símil de la Fiesta, ahora que estamos en las Fallas y Mercadona es de Valencia, un Mercadona se parece a otro Mercadona como un novillero de escuela taurina a otro novillero de escuela taurina. Da igual que entres en el Mercadona de Pozuelo o en el de Tarifa. Como en todos disponen los artículos con el mismo esquema, sin preguntar sabes dónde está el papel de cocina y dónde el pan de molde. Y no como en otros, que en Extremadura tienen la frutería donde en Castilla está el agua mineral, un lío. Ah, y en Mercadona, donde al cliente los empleados lo consideran «El Jefe» y así lo llaman, encuentras siempre dependientes a quien preguntar. Y cuando preguntas, no sólo te dicen dónde está la leche, sino que te acompañan hasta allí. Y no como en otros, que cuando harto de buscar encuentras por fin a un dependiente y le preguntas, te responde de muy malas maneras:

- Ah, yo no sé, yo no soy de esta empresa, yo vengo a reponer los yogures.

Pero, sobre todo, soy mercadonista por envidia regional. Como andaluz, a mí me da envidia que el Reino de Valencia sea sede y norte de un negocio de este calibre, con 60.000 trabajadores, 1.220 tiendas por toda España y un beneficio neto anual de 320 millones de euros. A mí me gustaría que en Andalucía hubiera algo igual para sacar beneficio a nuestros productos. Artículo que echas al carro, sea un pollo, una lechuga o incluso gazpacho andaluz, cuando le miras la etiqueta compruebas que está hecho en Valencia: «Jornal para los nuestros», que decía Padilla Crespo. Hasta el agua destilada para la plancha está fabricada en Valencia. Eso sí que es un nacionalismo verdadero, potenciando y fomentando la economía propia sin avasallar a nadie, y sin rotular los productos en valenciano, aunque Mercadona signifique en esa lengua «Mercado de la Mujer». Todos tendríamos que aprender a defender lo nuestro como en Valencia hace Juan Roig, el inventor y presidente de Mercadona. Cada vez siento más envidia por Valencia. Valencia no prohíbe los toros, los declara Bien de Interés Cultural y, encima, Mercadona aumenta el PIB autonómico allá donde tenga una tienda con su SPB, Siempre Precios Bajos. Y sin poner «txocolatoak» en las tabletas maravillosas de Villajoyosa. Vamos, que ni siquiera pone que son paisanas de Paquito el Chocolatero, a quien Mercadona está haciendo rico.

 

Articulos de días anteriores

Ir a página principal (Inicio) de www.antonioburgos.com

 

Para buscar dentro de El RedCuadro

 
    

 

Correo Correo

Clic para ir a la portada

Biografía de Antonio Burgos


 

 

Copyright © 1998 Arco del Postigo S.L. Sevilla, España. 
¿Qué puede encontrar en cada sección de El RedCuadro ?PINCHE AQUI PARA IR AL  "MAPA DE WEB"
 

 

 


 

Página principal-Inicio