Con razón
sostiene Jiménez Lozanos que Aznar tiene mucho que ver con
Azaña. Hombre, de momento ha hecho otra vez los Nuevos
Ministerios. Pero no con fachada de granito, soportales y Corte
Inglés cerca, sino todo virtual, signo de la hora. Y como por el
propio programa radiofónico de Losantos sé que andan por la
Corte buscando un nombre certero para el nuevo ministerio de Anna
Birulés, tengo el gusto de comunicar a tan ilustre compañero que
lo han encontrado aquí abajo. No ha sido un analista político,
ni un analista de lípidos y triglicéridos. Ha sido un
bolsillero. En esta bendita tierra todos somos como el padre
Adán, en el placer paradisiaco de irle poniendo nombre a las
cosas por primera vez. Un día, le pusimos Mienmano al que
trincaba la tela, y Mienmano se le quedó. Otro día, un gaditano
dijo que menudo pelotazo iba a pegar "de cara al 92", y
pelotazo se quedó. Estas denominaciones han pasado al habla
común sin autor conocido. Si yo cobrara derechos por Mienmano y
por el pelotazo, estaba ya en Miami, sin necesidad de que
Telefónica me pusiera un estanco. Nadie paga regalías ni
reconoce autoría de estos hallazgos por lo que dijo el Mienmano
de Antonio Machado, Manuel: "Hasta que el pueblo las canta/,
las coplas, coplas no son."
La gente se
ha quedado con la copla de Aznar: "Vayamos todos juntos, y yo
el primero, por la senda del punto com." Como todo va por el
palo de lo virtual y multimedia, con la cejilla en el 6 de
Internet, la gente se ha quedado con la copla de que España, tras
ir bien cuatro años, ahora va a ir otros cuatro años de cine.
Como que me han dicho que los próximos que se van a encerrar con
un solo juguete para lo de El Gran Hermano van a ser todos
los miembros del Consejo de Ministro, en Moncloa. Otra gran
novedad. Como hay que contener el gasto público, estamos
ahorrándonos los artículos el y la. Pronto no va a
quedar más la que el "La,La,La" de Massiel.
Ahora es Moncloa, no La Moncloa, y Zarzuela, no La
Zarzuela. Aznar fue de Zarzuela a Moncloa, nos ahorramos de
momento dos artículos determinados, y puso la primera piedra de
los Nuevos Ministerios.
Y aquí
entra la guasa de Sevilla. Esta vez con autor. Tras leer mi
artículo del adiós a la vida del Ministerio de Industria, mi
vecino de abono en los toros, que es Angel Casal, hijo del
republicano Rey de los Bolsos, como seguramente se emocionaría
con este adiós en función de la "Tosca", porque sabe
mucho de ópera, fue y clavó el nombre del nuevo ministerio de
Anna Birulés. Muy serio, como aquí se dicen estas cosas, me
dijo:
-- -- Total,
que eso es el Ministerio de Ciencia... Ficción, ¿no?