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Puntas del Diamante

 Antonio Burgos

El Mundo de Andalucía,  3 de junio  del 2000


Anda, la Guerra de Sucesión y Chaves con estos pelos...

El árbitro Chaves, visto por Idígoras y Pachi

El árbitro Chaves, visto por Idígoras y Pachi

 

El árbitro.- Guerra, que es un hombre de teatro que le echa a todo mucho teatro, le ha puesto a Chaves la caracterización que le corresponde en la representación de las guerras intestinas del PSOE: de árbitro. Pero de árbitro casero. Bastante casero. Tan casero que, como decían las chirigotas de Cádiz, más que con pantalones cortos y camiseta morada de moaré tendría que ir con la bata y las zapatillas. Si será casero este árbitro, que no vean la casa que se está haciendo en San Telmo y la que lió por irse a vivir por la cara a la Casa Sundeheim.

Lección de Historia.- Esto pasa por quitar la Historia de los planes de estudio. Aparte de que el árbitro es casero, que no es de la Historia, sino del "Marca", lo que está ocurriendo en el PSOE es exactamente como la Guerra de Sucesión. Es la Guerra de Sucesión sin Archiduque Carlos, pero nadie lo sabe. Las batallas de Almansa, de Brihuega, de Villaviciosa, al cambio, son las batallas de Rosa Díez, de Matilde Fernández, del otro y el de la moto. Miren un libro de texto, de los que ya no se estudian, y verán cómo es igualito: "Carlos II se decidió a designar heredero a Felipe de Anjou, que ocupó el trono con el nombre de Felipe V. La Guerra de Sucesión tuvo en la Península caracteres de guerra civil; porque el temor de los súbditos de la Corona de Aragón de ver mermados o suprimidos sus privilegios, según las normas centralizadoras del estado francés, acabaría por lanzarlos al campo del Archiduque Carlos, pretendiente austriaco a la Corona española frente a Felipe V". Vamos, es que ni siquiera hay que cambiar el nombre de Felipe para que todo sea igualito. Sólo que aquí no se trata de la sucesión de Carlos II (segundo izquierda, naturalmente), sino de Felipe Lo Que Sea. Pero lo mismo: el temor de los súbditos del felipismo de ver mermados o suprimidos sus privilegios acabaría por lanzarlos... a unos contra otros. Con un canto en los dientes hemos de darnos si al final de esta nueva Guerra de Sucesión no nos vuelven a quitar Gibraltar por el procedimiento del tirón del Tratado de Utrecht.

Leocadio Marín.- Anda, Leocadio Marín sigue existiendo. ¿Tú no ves cómo esto de la Guerra de Sucesión es pura Historia? Que Leocadio Marín ha tomado en esta guerra partido ha sido importantísimo: ha servido para demostrar que Andalucía puede funcionar perfectamente sin los leocadios de turno en la Delegación del Gobierno.

Entierros.- ¿Y la pinta de empleado del Ocaso que se ha sacado Pepe Torres en la foto del acuerdo entre administraciones para enterrar a los pobres marroquíes ahogados de las pateras? En esa foto nada más que faltaba Manuel del Valle, que hubiera dado de lo más propio...

Más Historia.- ¿Será por historia? González está ahora tan cabreado con la Transición, y está volviéndola a escribir para presentarse con ella al próximo Premio Planeta, porque sabe que lo que ha ocurrido en su partido es que no se han cumplido las previsiones sucesoras cuando lo dejó todo atado y bien atado con aquella frase famosa: "Ni quito ni pongo Rey, pero mejor que echemos a Borrell y pongamos a Almunia, que traga."

Rabitos de pasas.- En estas guerras y reescrituras de la Historia, la lista de Los 40 Principales de los 40 ex ministros de la UCD en favor de su antiguo señorito Suárez ha servido para mucho. Por ejemplo, para que algunos se acuerden de que hubo una vez un ministro que se llamó Félix Pérez Miyares, vulgo Millares, el que llevaba la falta de ortografía incorporada en su segundo apellido.

Tripleta.- Y de aquella tripleta sevillana Clavero, Añoveros y Soledad Becerril, no hay podido firmar, ay, Jaime García Añoveros...

Día sin Alcohol.- Muy bueno lo suyo, don Ignacio Camacho, del Día sin Alcohol igual que lo del Día sin Tabaco. ¿Mira que si los enfermos de cirrosis se ponen ahora de acuerdo para reclamar conjuntamente a las bodegas de Jerez y a las destilerías de bebidas blancas de Málaga?

Distancia.- Dicen que la distancia es el olvido. O no. Chaves le hace caso a los antitabaquistas porque el "lobby" tabaquero de Virginia le coge muy lejos. En cambio, no pestañea ante el "lobby" alcoholero, que lo tiene bien cerca.

PTA.- La nostalgia que le entrará a Isidoro Moreno cuando lea en los periódicos lo del PTA... Pero el PTA ya no es el Partido del Trabajo de Andalucía, sino el Parque Tecnológico de Andalucía en Málaga.

Listas de espera.- En las listas de espera hay 41.000 andaluces. Y Vallejo dice: "Por mí como si se operan..."

Vallejo.- Como los consejeros de la Junta tienen la virtud de que no los conozca nadie, de modo que la gente sigue creyendo que el consejero de Salud es Arboleya, aclaramos que esta Vallejo que da el cante de las listas de espera no es Vallejo el cantaor. Los discos de este Vallejo no están pasados a CD en reconstrucción digital; están en los hospitales del SAS. Que para muchos enfermos es el SOS que lanzan en las botellas de náufrago que nadie recoge.

Hannover.- Qué raros son estos alemanes. Han inaugurado la Expo de Hannover y no se ha oído ningún escándalo de maletines, ninguna pellonada, ni nada. ¿Pero qué clase de Expo es ésa?

San Fernando.- Con la de días que hay en el año, el crimen de San Fernando se celebró precisamente por el día de San Fernando.

Jueces.- Hay jueces-estrella. Y otros que quieren serlo y se quedan en Jueces Estrellita Castro. Como Juan José Parra, el juez del caso de la Real Isla de León, que se las ha buscado por cante.

ABEL INFANZON "LA ESE 30"

 

MEMORIA DE ANDALUCIA  La Andalucía de  Idígoras y Pachi

   


 

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