Volver a la página principal Indice de "Puntas del Diamante" | ¿QUIÉN HACE ESTO? | Articulos de "El Mundo"
Puntas del Diamante / Antonio Burgos
El Mundo de Andalucía, sábado 20 de octubre del 2001 Ilustración de Idígoras y Pachi Entrevista con IDIGORAS Y PACHI
Ay, Vaporcito del Puerto...
Lo de Javier Ruibal ha sido como un desagravio cultural al Vaporcito. Embarcando a todo el modernío, ha liberado al Vaporcito de su leyenda etílica. Paco Alba fue el gran cantor del "Adriano III". Le hizo aquel pasodoble carnavalesco inolvidable: "Ay, vaporcito del Puerto,/cuando en ti me embarco/cuando en ti navego"... Pero, sin saberlo, le hizo una faena al Vapor con el pasodoble. Paco Alba había escrito el "Asturias, patria querida" de la bahía, la canción oficial de los borrachos. Cuando cogen el morazo, todos los borrachos de la Bahía rompen a cantar destempladamente las excelencias del Vaporcito, en el estadio de cantos regionales de las fases locales de la borrachera: copeo, más copeo, recopeo, llena aquí otra vez... y Vaporcito del Puerto.
Lo de Javier Ruibal ha sido también la valoración postmoderna del barco más sentimental que cruza las aguas andaluzas: rumbo al siglo XXI en un vapor como del XIX. Marinero, que se va el vapor, y que viene Santiago Segura a ver cómo se navega desde el embarcadero de la plaza de las Galeras Reales al Muelle Ciudad. Barco albertiano, compartiste, barco de hermosa lentitud que desafía a los tiempos, no sabemos si el Vapor del Puerto está declarado Bien de Interés Cultural de Andalucía. Cosas menos simbólicas subvenciona la Junta. Porque el barquito ahora homenajeado ha estado a punto de desaparecer. Las fatigas que ha pasado Pepe el del Vapor con la subida de precios del gasoil...
Memoria de Andalucía La Andalucía de Idígoras y Pachi
Idígoras y Pachi en el archivo del humor de EL MUNDO
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La obra más conocida de Blas Infante es "El Ideal Andaluz". Quizá uno de los libros que más dinero genera en toda la literatura universal. "El Ideal Andaluz" genera anualmente los tres billones de pesetas de presupuesto de la Junta. ¿Cuántos viven en Andalucía de "El Ideal Andaluz", con el mérito añadido de que ni han leído "El Ideal Andaluz" ni tienen el menor interés por leerlo? Pero Blas Infante, aparte de este libro fundamental, nos dejó otras dos obras importantísimas en su vida: Luisa Infante y María de los Ángeles Infante, sus hijas. Con Alegría, su mejor obra. Si Blas Infante ocupa el lugar que hoy tiene en la historia de Andalucía, es gracias a sus hijas, que dedicaron buena parte de su vida, de su tiempo, de su dinero, de sus ilusiones, a rescatar la memoria del padre que un día los falangistas se llevaron para fusilarlo. María de los Ángeles no solamente reivindicó la figura de Blas Infante, sino que la supo rescatar del secuestro en que los supervivientes del georgismo la habían mantenido en los últimos años del franquismo. Hacia 1970, los infantistas de la vieja guardia hablaban de georgismo, no de andalucismo. Pasar a don Blas Infante de la renta enfitéutica al Estatuto Andaluz fue el gran mérito María de los Ángeles Infante. ¿Y Luisa? Lo de Luisa es más callado aún, más abnegado. La vestal Luisa Infante fue la camarista del santuario del andalucismo, la que conservó el legado material de escudo, himno y bandera, la biblioteca, la triste memoria fratricida de Villa Alegría. La Junta de Andalucía ha pagado un dinero por la casa de Blas Infante entre Coria y La Puebla del Río. Poco dinero es para pagar los callados años de entrega de Luisa Infante. Luisa Infante conservó como los chorros del oro esa casa. Casa que ahora, en manos de la Junta, es cuando empieza a correr de verdad peligro. De unas manos amorosas, la casa de Blas Infante pasa a una administración derrochona. Y hay cosas que no se pagan con dinero. Ni con tres billones de pesetas.
Qué afición la de Jaén
Sabíamos que había aficionados a los toros, peñas taurinas, franceses de Nimes que sueñan con Andalucía como el paraíso con tendidos de sombra. Pero no que hubiera Ayuntamientos institucionalmente aficionados a los toros. ¡Qué afición la del Ayuntamiento de Jaén! Se ha gastado 23 millones en entradas de toros para las corridas de la feria de San Lucas. Con un abonado así, ya nos gustaría a muchos ser empresarios de la plaza de toros de Jaén. En Jaén, para ir de balde a los toros, no hace falta ser autoridad: basta con conocer a alguien en el Ayuntamiento y mangarle una entrada. Los 14 miembros del equipo de gobierno se llevaron 992 entradas en la feria del año pasado. Caben a 70 entradas. ¿Cómo pueden colocarse 70 entradas de tifus? Y luego dicen que en Sevilla es donde más afición hay a los toros. Jaén la supera. En Jaén, hasta el Ayuntamiento empeña el colchón del presupuesto para sacar una entrada de toros.
Finito es a Córdoba como la Infanta Doña Elena es a Sevilla. El Cura Castillejo es a la boda de Córdoba como el arzobispo Amigo Vallejo fue a la boda de Sevilla. Arancha del Sol va de consorte, en plan Marichalar. La iglesia de Santa Marina va de Catedral hispalense. Inmaculada Casal, en "Contraportada" de Canal Sur, va de Pilar Miró en la retransmisión del evento. Carlos Telmo va de Fernando Almansa. Y sigan poniendo comparaciones, que salen todas. Todas las cuales nos parecen de perlas, de perla agarena del Guadalquivir, naturalmente. Está muy bien que no sólo Sevilla sea la ciudad nupcial de Andalucía por antonomasia. Quién sabe si Finito acaba de inaugurar la Industria de la Boda en Córdoba, porque estas cosas, como los vestidos de las novias, suelen traer cola. Primero fue la Industria de la Platería y ahora será la Industria de la Boda. Una buena ración de medios audiovisuales y escritos sobre una boda la convierten automáticamente en modelo a seguir para todas las muchachas que se van a casar. Las novias de todos los pueblos de Córdoba querrán casarse como Finito y Arancha. Miguel Castillejo no va a dar abasto bendiciendo los nupciales anillos. El problema va a ser el Palacio de Viana. Muchas cordobesas, con toda razón, no querrán ser menos que Arancha del Sol y querrán que el cura de Cajasur les preste también el palacio de Viana para el convite.
De las de peina y volantes
La ahora recordada Juanita Reina cantaba: "De las de peina y volantes, qué pocas vamos quedando". Porque Juanita no fue a Afganistán, que, si no, hubiera dicho que de las de peina y volantes quedan miles y miles. Según la teoría del "mulá" de la mezquita de Málaga. El "mulá" es como el párroco, pero en musulmán. Cura al fin y al cabo. Y ha salido por los mismos cerros de Kabul que suelen los curas, cuando ha justificado a las tapadas de Afganistán argumentando que para ellas ese velo que les cubre la cara infamantemente es una prenda típica, como la peineta o los volantes para las andaluzas. Esperemos que tras las menciones a Al Andalus de su lugarteniente, Ben Laden no salga en su próxima aparición televisiva con sombrero de ala ancha. De ala ancha del Sol, como la boda de Córdoba... De momento los corresponsales de TVE en la guerra ya salen con el gris pañuelo de los almonteños al cuello. Cuando creen ellos que van disfrazados de naturales del lugar, se ponen como los de Almonte a la hora de sacar a la Blanca Paloma.
Industrial Bollullos
La realidad andaluza a veces es de Paco Gandía, o de Los Morancos. Después del comando musulmán en Lepe, Bollullos va inaugurar un Parque Industrial por todo lo alto: el PIBO 49, Parque Industrial de Bollullos.