Volver a la página principal Indice de "Puntas del Diamante" | ¿QUIÉN HACE ESTO? | Articulos de "El Mundo"
Puntas del Diamante / Antonio Burgos Correo
El Mundo de Andalucía, sábado 29 de junio del 2002 Ilustración de Idígoras y Pachi El último libro de Idígoras y Pachi
El sueño de un Parlamento
-- Andaluz, este no es tu referéndum...
Y aquel pueblo contestó:
-- ¿Cómo que no? Ahora te vas a enterar tú si es mi referéndum o no es...
De aquel adelantamiento por lo hondo que el hizo el pueblo andaluz a sus dirigentes, y muy especialmente a los de la UCD que entonces democráticamente se había dado, resultó un Estatuto que los mengues del destino no habían querido que nuestra tierra tuviera, cuando Blas Infante lanzó la primera idea en 1936. Hay que reconocer que lo que se dice puntería histórica no tuvo ciertamente Don Blas a la hora de escoger año para lanzar la idea de un Estatuto Andaluz.
En aplicación de aquel Estatuto, que venía de Carmona, como la diligencia de Fernando Villalón o como la fuente con catorce o quince caños del polo de Tobalo, los andaluces eligieron un Parlamento autonómico, lleno del mejor de los contenidos políticos: ilusión. Creían los andaluces que con un Gobierno autonómico en el Pabellón Real del Parque de María Luisa y con un Parlamento regional constituido en el Alcázar de Sevilla, las cosas iban a marchar de forma distinta, que nunca más iba a haber un parado, que los niveles económicos iban a superar las medias españoles, que se iban a lograr niveles culturales como nunca se soñaron.
En cuanto a medios, aquel Parlamento andaluz estaba ciertamente cortito con agua. Una vez constituido, comenzó a funcionar en el Salón de San Hermenegildo de Sevilla, lo que motivó el hecho insólito de que El Corte Inglés sirviera como cafetería de un Parlamento. Había dos ujieres y medio, un letrado transferido, unos escaños de fortuna y pare usted de contar. Pero de ilusión y de confianza del pueblo en su institución democrática había toda la que usted quisiera.
Pasó el tiempo, y aquel modestísimo Parlamento lleno de ilusiones fue dotado de grandes edificios, de hermosos y lujosos salones de plenos, de medios, de funcionarios, de letrados, de asesores, de coches oficiales y de la Biblia en pasta. Y ocurrió que conforme iba teniendo más medios, el Parlamento se quedaba con menos fines. La gente no conocía ni quienes eran sus diputados por la provincia, ni qué leyes aprobaban. En todo caso, el Parlamento era un sitio donde iban los manifestantes a poner la pancarta y a echar la sonora pitada. Los manifestantes de la pancarta eran los únicos que seguían teniendo confianza en aquel Parlamento.
Ahora se han cumplido veinte años de la muerte de aquella ilusión.
Memoria de Andalucía La Andalucía de Idígoras y Pachi
Idígoras y Pachi en el archivo del humor de EL MUNDO
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Mucho hablar del árbitro del encuentro España-Corea, con lo lejos que está Corea, y resulta que aquí hemos tenido otro caso El Gandur mucho más cerca, sin que nadie haya dicho hasta ahora ni palabra. Nos referimos al arbitraje del encuentro Limasa-Ayuntamiento de Málaga en los cuartos de final y los cuartos a espadas de la huelga de basura. La FIFA de la autoridad laboral nombró para arbitrar ese encuentro, que tenía soliviantado al jugador número 12 de los sufridores de las bolsas de basura por recoger, a un colegiado del Colegio Gaditano de Árbitros Laborales, el trencilla Jesús Cruz Villalón. No sabemos si asistido en las bandas (salariales) por otros colegiados de Trinidad-Tobago y de Uganda, el caso es que la decisión del árbitro le ha dado el partido a los trabajadores de Limasa y le ha quitado los puntos en conflicto al alcalde de Málaga. El alcalde de Málaga no es Casillas ciertamente, y no ha podido parar el penalti. De donde se infiere que si Cádiz es La Habana con más salero, Málaga es Corea con Cruz Villalón en lugar de un árbitro egipcio.
El armario de los sueldos
Mañana, Día del Orgullo Gay. Y en las vísperas, las salidas del armario de los secretos mejor guardados: los sueldos de los presidentes de los grandes bancos. Bueno, los sueldos, no, los sueldazos. El sueldo de Botín sí que ha salido del armario. El ventaNillero del Santander ya puede coger la calculadora para ver por cuánto hay que multiplicar su sueldo para llegar al del presidente. Costumbre la sacar los grandes sueldos de las empresas privadas del armario que debería ampliarse a las públicas. Quizá el sueldo de Botín no sea nada si lo comparamos con lo que ganan los ilustres cesantes a quienes dieron el paracaídas de oro de la presidencia de una empresa pública del archipiélago de la Junta. Porque mientras el sueldo de Botín sale de la cuenta de resultados de un banco particular, estos otros sueldazos salen de las arcas públicas. Y nadie dice nada. Como decía don Manuel Giménez Fernández: aquí mucho hablar de los latifundios, pero nadie dice nada de los latisueldos...
Carlos Castilla, sin padrinos
Quien no tiene padrinos ni se bautiza ni entra en la Real Academia Española. A estas horas podía haber un ilustre andaluz más entre los inmortales, el psiquiatra y escritor gaditano-cordobés Carlos Castilla del Pino, pero le dieron borricate de votos. Los tres académicos que lo presentaron le hicieron el feo de no asistir a la sesión de votación. Mucho firmar propuestas, para luego no ir a votarlo. Damos los nombres de estos tres padrinos que han cometido ese agravio andaluz en la Academia: dos José Luis, Pinillos y Sampedro, y un Mario, Vargas Llosa.
Esta vez no ha sido el tradicional jarro de agua fría del informe de una Caja de Ahorros sobre el habitual triunfalismo de los indicadores económicos que suele dar la Junta en su propaganda de la II Modernización. Ha sido algo peor, porque se refiere a la madre de todos los subdesarrollos como es la cultura. Semana de indicadores de lectura, en libros y en prensa, y datos para no dormir. La Casa del Libro de Sevilla, del Grupo Planeta del andaluz Lara, ha revelado sus ventas al cumplir el primer laño de su establecimiento en pleno centro de la capital. Están contentísimos, porque han vendido 250.000 ejemplares. Metamos la reductora, como si esto fuera un 4x4. No es para tanta alegría. Con todo el catálogo de todos los autores de todas las editoriales, la Casa del Libro de Sevilla ha vendido al fin y al cabo lo que suele Arturo Pérez Reverte de una sola novela en toda España a lo largo de un año. La gente de Lara puede echar al vuelo todas las campanas que tenga por conveniente, e incluso alquilar las de la Giralda para un pino mayor de primera clase, pero 250.000 ejemplares en un área metropolitana de más de un millón de habitantes nos parecen una ridiculez, que habla muy a las claras del bajísimo consumo de papel impreso y encuadernado. Algo así como el consumo de papel diario que se pone a la venta en los quioscos. Andalucía sigue teniendo uno de los más bajos índices de lectura de periódicos de toda España. Mientras la media nacional es de 104 ejemplares por cada 1.000 habitantes, aquí estamos en los 72 ejemplares por 1.000 habitantes. Lo de Jaén es de sonrojo, y solamente Cádiz da unas cifras más o menos aceptables, no en vano se inventó allí la Libertad de Imprenta. Lo de siempre: una billonada de presupuestos anuales y veinte años de autonomía no han sacado a Andalucía del subdesarrollo en el consumo de papel impreso. Aquí leemos bastante menos que El Tostado. Claro, con este clima, con estas copas, con estas tapas, ¿quién va a leer?
Nuñez y el Góngora
Por todo lo anterior se explica lo del poeta Vicente Núñez. Ha tenido que cumplir la triste ley andaluza de tener que morirse para que le reconozcan el mérito. Con la de años que han tenido para dárselo, sólo cuatro días después de morir le otorgaron el premio "Góngora".
Belén Ordóñez
Tiene 14 años y entre 13.500 escolares de toda España ha ganado el concurso nacional de redacción que convoca Coca-Cola. Belén Ordóñez es excepción en esta Generación LOGSE con tantos problemas de expresión oral y escrita. A pesar de sus méritos, esta Belén Ordóñez no saldrá en TV. Su hermana no se llama Carmina.