Como ayer, 9 del 9 del 99, se jugaban las semifinales del Efecto 2000, me di una vueltecita por la muralla real de Internet a ver qué pasaba. Y cuál no sería mi sorpresa cuando en un boletín (Noticias Intercom: www.noticias.com ) me enteré de algo que debe llenarnos de gozo. Con el fin del siglo terminará también el "que inventen ellos" de Unanumo. La Universidad de Extremadura va a inventar una "nariz electrónica" que permitirá saber si con el jamón ibérico nos dan carrete El invento, con un presupuesto de investigación de 122 millones de pesetas, se llama "sistema electrónico para el control del procesado y calidad del jamón ibérico". Pero en la Extremadura del Bellotaris los propios investigadores lo apodan "Jamotrón".

Es lo que nos estaba haciendo falta en España: el jamotrón. Ahora veremos lo que es pata negra, dehesa y bellota y lo que huele a establo y pienso compuesto. Imagino que la investigación llevará a la fabricación de jamotrones de bolsillo, con los que podamos hacerle la prueba del 9 (del 9 del 99, claro) al jamón del bocadillo que nos venden como ibérico serrano de bellota, siendo casi primo hermano del señor York. Espero que, tras el éxito de crítica y publico del jamotrón, los investigadores extremeños creen el "Aguinagatrón", que nos permitirá descubrir tanta angula de plastilina como venden a 7.000 pesetas la ración, así como el "Sanlucartròn", que nos dirán la verdadera patria marroquí de los langostinos.

Con todo, la más benéfica utilidad del "jamotrón" será en su ampliación a la política, lo que no creo que haga a los universitarios extremeños alejarse mucho de su línea de investigación. Dos tornillitos de nada, un "chip" de pituitaria y quedará de dulce para olerse la tostada de la política. Pues urge que tras el "jamotrón" inventen el "políticotrón", que será el aparato que venimos echando en falta desde 1982: el corruptómetro. Tú te llevas el "politicotrón" en estos días, un poner, a Ceuta, lo enchufas, y es que se rompe la aguja y el aparato sale echando humo, del cante que da. Un "politicotrón" puesto en Barcelona nos diría de verdad si Maragall huele a Partido Demócrata americano o si simplemente da un tufo espantoso a querer quedarse con la fábrica de butifarras del señor Pujol. Ay, si yo tuviera ahora un "politicotrón" a mano... Me diría de verdad a qué huelen todos esos como Alvarez Cascos que han acudido presurosos a apuntarse en el Club de Fans de Julia Otero.

 La noticia del Jamotrón en Internet

http://www.noticias.com/noticias/1999/9909/n99090318.htm