En Sevilla cerraron y trasladaron a Los Remedios la Fábrica histórica bastante antes que en Cádiz. En Sevilla se cree la gente que todo el edificio de la calle San Fernando fue siempre entero Fábrica de Tabacos, pero no era así. La parte que da al Caballo del Cid, donde se puso la Facultad de Derecho antes que la Universidad ocupara todo el edificio, funcionaba como cuartel del Ejército y allí estuvo de guarnición una unidad de carros de combate, no sé si de la Infantería de Soria 9 o de la Caballería de Sagunto 7, donde por cierto hizo las prácticas como alférez de Milicias el escritor Manuel Ferrand. Del edificio de San Fernando se trasladó a Los Remedios luego hasta la cofradía de Las Cigarreras. Y en Cádiz, más tarde, dejaron el edificio histórico e historicista de la calle Plocia para llevar la Fábrica de Tabaco (en singular) a la Zona Franca.

He citado a Manuel Ferrand y con los jardines que Sevilla dedicó al autor de "Con la noche a cuestas" en Los Remedios linda uno de los absurdos más grandes del callejero: la muy mal llamada Glorieta de las Cigarreras. Nombre que le puso el anterior Ayuntamiento en la exhumación de odios de la Memoria Histórica, para evitar que aquello se siguiera llamando Alféreces Provisionales...que es como le sigue diciendo la gente en Los Remedios. Quizá sea la máxima contradicción del callejero sevillano: por la Glorieta de las Cigarreras nunca pasó en la vida una sola cigarrera de las sevillanas del Pali. Glorieta de las Cigarreras habría de ser, en todo caso, la actual Plaza de Cuba, por donde sí que pasaban las cigarreras de Triana todas las mañanas camino del trabajo, cuando aún no existía el Puente de San Telmo y cruzaban el río en unas falúas como góndolas venecianas que las pasaban desde la banda del Puerto Camaronero a la orilla sevillana de la Torre de Oro. ¡Por allí sí que pasaron cigarreras! Más que por la calle San Fernando, dónde va a parar... Cómo será la cosa, que por la Glorieta de las Cigarreras no ha pasado nunca ni la Cofradía de las Cigarreras, y eso que ha cambiado de itinerarios a lo largo del tiempo con ese palio perfecto de cajón que supera todos los recorridos que le echen, hasta el desangelado Paseo Colón, donde me harté de contemplarlo este Jueves Santo al pie de la Torre del Oro, cuando se le había roto algo de la peana a la Virgen de la Victoria y se llevó allí no vean la de tiempo hasta que el prioste terminó de hacerle la ITV cofradiera. (Las Cigarreras también se han quitado del tabaco. Ahora a la cofradía le gusta que le digan "Columna y Azotes". Y no habré de ser yo quien la azote desde la columna por ello.)

Si hubieran querido poner bien los nombres y no con los riesgos de la prisa y del odio revanchista, tenían que haberle puesto Glorieta de Altadis, pero nunca de Las Cigarreras del Pali, de la calle San Fernando y del Puerto Camaronero. Por cierto: con las Medallas del Trabajo, el Gobierno ha imitado al Ayuntamiento. Al Pali le dieron la Medalla de Sevilla a título póstumo, ¿no? Pues el Gobierno le ha dado a título póstumo la Medalla del Trabajo a Paco de Lucía. Como siga esta moda, dentro de nada le darán a título póstumo la Medalla de Bellas Artes a Velázquez y a título póstumo la Laureada de San Fernando a Agustina de Aragón.