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ANTONIO BURGOS | EL RECUADRO


ABC de Sevilla,  4 de junio  de 2022
                               
 

La derecha demasiado confiada

Yo que el PP, no publicaba una encuesta más del CIS andaluz. Y más afirmando lo que dice la última de las dadas a conocer. Según el barómetro del Centro de Estudios Andaluces, Juanma se acerca a la mayoría absoluta con hasta 49 escaños y podría intentar gobernar en solitario. Que PP y Vox duplicarían prácticamente sus resultados con 47-49 diputados y 21-23, respectivamente, mientras Cs sólo 1-2 escaños. Y que, por el contrario, el PSOE lograría 32 diputados; Por Andalucía, 5; y Adelante Andalucía 1, con lo que todas las izquierdas juntas no sumarían mayoría de gobierno.

Estos datos, lejos de darle alegría a tu cuerpo, Macarena, son para preocuparse. Un exceso de confianza en ganar las elecciones por parte de sus votantes podría hacer que el PP las perdiera. Mientras que el PSOE es una máquina de movilizar votantes, los del PP son perezosos a la hora de ir a las urnas en cuanto ven que aseguran que la cosa está ganada. Insisto: decir que van a ganar las elecciones es la mejor forma de perderlas. Y más cayendo el 19 de junio en el domingo que cae, al final del puente del Corpus en Sevilla, en Granada y en algunas otras localidades andaluzas que celebran aún en jueves, como fiesta local, la conmemoración eucarística. Un buen día de playa.

El razonamiento del PSOE ante sus votantes es: "¡Que viene la derecha y hay que echar a Moreno Bonilla de San Telmo!". Y todos a votar, en esa máquina de ganar elecciones que desde hace muchos lustros es el partido, y a asegurarse el voto por correo de los que estén en la playa. El razonamiento de los votantes del PP, por el contrario, es tan peligroso como: "Total, si las elecciones están ganadas y Juanma se va a quedar al borde de la mayoría absoluta, si es que no la saca, ¿para qué voy a ir a votar?".

Juanma no ha insistido en este peligro. Incluso se ve un cierto triunfalismo en San Telmo que advierto como muy peligroso para sus ocupantes, porque ya ocurrió una vez igual con Javier Arenas y la confiada derecha abstencionista. Ha dicho Juanma: «Para nosotros es un acicate saber que las encuestas reflejan una tendencia de ilusión por consolidar el cambio en Andalucía para los próximos cuatro años y que haya posibilidad de un gobierno en solitario». Este triunfalismo lo ha compensando pidiendo «prudencia» al respeto y que «no haya exceso de confianza». Pero muy poco. El PP debería hacer toda la campaña como si tuviera las elecciones perdidas, teniendo en cuenta además el daño que el Efecto Vox puede hacerle incluso entre sus propios votantes. Mi resumen es que el PP tiene el 19-J dos adversarios: el PSOE y la excesiva confianza de sus partidarios, que puede convertirse en peligroso abstencionismo. Si le sumamos las voces de "que viene el lobo" sobre Vox pueden que salgan esas cuentas que a la suma de todas las izquierdas no les cuadran por ahora. Y, encima, Macarena Olona, que le puede hacer media campaña al PSOE nada más que lance sus propuestas, en algunas de las cuales tiene razón, pero muchas de ellas son salidas de pata de banco ideales para meter a los votantes del PSOE ese miedo que los del PP, temerariamente triunfalistas, no tienen.

 

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