Volver a la página principal Indice de "Puntas del Diamante" | ¿QUIÉN HACE ESTO? | Articulos de "El Mundo"
Puntas del Diamante / Antonio Burgos
El Mundo de Andalucía, sábado 27 de octubre del 2001 Ilustración de Idígoras y Pachi Entrevista con IDIGORAS Y PACHI
¿Existe Almería?
Los de Almería tienen mucha peor suerte que los de Teruel. Almería es la Teruel andaluza, pero peor. No creo yo que en el PIB aragonés genere Teruel los billones de pesetas que supone la agricultura y el turismo de Almería en la renta regional andaluza. Almería es una fábrica de meter dinero en Andalucía y en España a costa de la Humanidad. Basta ver los camiones por las carreteras españolas, camino de Europa desde los invernaderos, o basta ver los hoteles llenos de turistas en el verano y en lo que no es el verano.
Pero nada de esto se le agradece ni se le reconoce a Almería. Los almerienses son andaluces de segunda. Incluso de segunda nos parece mucho. De tercera. Madrid los maltrata y en Sevilla no se enteran de estos malos tratos. Igual que los de Teruel se plantaron en Madrid con la pancarta de "Teruel existe", los almerienses tendrían que plantarse con una pancarta entre interrogaciones: "¿Existe Almería?" Y no tendrían que plantarse en Madrid, sino en Sevilla, ante la Junta de Andalucía, que es donde empieza el olvido.
El último agravio a Almería en materia de comunicaciones no tiene nombre. Ir a Almería en avión cuesta como ir a Londres. No es un símil, son las tarifas de Iberia. Un trayecto Almería-Madrid en avión cuesta en turista 56.590 pesetas. Un trayecto en turista Sevilla-Londres cuesta 60.094 pesetas. Claro, como se creen que Almería está en el extranjero, le aplican tarifas internacionales. Y los vuelos, además, no son ya en reactores como antes, sino en aviones de hélices, como si fuera una Melilla peninsular. Ante estas tarifas aéreas discriminatorias, no cabe más solución que el tren. Pero Renfe ha suprimido el tren nocturno, por lo que tienes que perder dos días para hacer cualquier gestión en Madrid, para ir a protestar a Iberia, por ejemplo. Todo esto por no hablar de la situación de descuelgue de Almería en los planes triunfales de la Autovía del 92.
¿Es todo esto la venganza contra Almería, por aquella tibieza autonómica en el referéndum del 28-F? Más les hubiera valido quizá descolgarse de la autonomía andaluza. En Murcia no los hubieran tratado peor que los trata Sevilla.
Memoria de Andalucía La Andalucía de Idígoras y Pachi
Idígoras y Pachi en el archivo del humor de EL MUNDO
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Pablo de Olavide fue un ilustrado limeño que hizo carrera, un carrerón, en la Andalucía de Carlos III. En el último tercio del siglo XVIII, el Rey lo nombró asistente de Sevilla y superintendente de las Nuevas Poblaciones de Andalucía y Sierra Morena. Olavide fue el que fundó La Carolina, La Luisiana, La Carlota y tantos nuevos pueblos de Córdoba y Jaén, que creó trayéndose colonos de Alemania y de Suiza. Aquellas comarcas dejaron de ser un desierto, los caminos estuvieron seguros contra los salteadores y se innovaron las técnicas de explotación agraria en campos abandonados. En Carboneros (Jaén) parece ahora que han pensado en Olavide. Carboneros, como tantos pueblos andaluces, tiene dos aldeas abandonadas, donde no queda un solo habitante: La Mesa y El Acebuchar. Los cultivos de esas aldeas están abandonados, como esa Andalucía del olivar que se enjara por falta de mano de obra para coger la aceituna a precios rentables. ¿Y qué se les ha ocurrido en Carboneros? Pues emular a Olavide: hacer nuevas poblaciones de las aldeas abandonadas. Han ofrecido a los inmigrantes ecuatorianos esas dos aldeas, para que habiten sus casas y trabajen sus tierras. No es ninguna tontería lo que han hecho en Carboneros, y no sería descabellado pensar en una gran "Operación Olavide" para toda Andalucía. Vivimos en la contradicción de unas ciudades andaluzas con sus problemas de crecimiento agravados por la inmigración y, al mismo tiempo, unos pueblos abandonados y unas aldeas cuyas casas se están hundiendo. ¿No habría nadie en la Junta que estudiara la obra de Pablo de Olavide y la adaptara a nuestros tiempo, con una solución similar a la que han buscado en Carboneros? Es una contradicción esta Andalucía de la aceituna en el árbol por falta de mano de obra en los pueblos y los subsaharianos e hispanoamericanos, mientras, vendiendo "La Farola" en las grandes ciudades.
Autonomía a la gallega
Suelen llamar "votaciones a la búlgara" a las de aclamación y unanimidad. Podríamos llamar también "autonomías a la gallega" a aquellas donde no se ha producido nunca la necesaria alternancia política. Por ejemplo, Andalucía. En la noche electoral gallega, daba risa oír pedir la alternancia política en Galicia a los que desde hace veinte años impiden la alternancia política en Andalucía. Los jóvenes gallegos que estrenaban su derecho al voto no han conocido otra cosa en la Xunta que a Fraga. Aquí en Andalucía los superamos. Aquí en Andalucía, no solamente un muchacho de 18 años, sino nadie ha conocido un modelo de autonomía gestionado por alguien que no sea del PSOE. Como en el País Vasco tampoco ha conocido nadie una gestión de la autonomía que no sea del PNV ni en Cataluña nada distinto a Convergencia y Unión. ¿Será el sino de las autonomías del 151? Es curioso, pero en ninguna de las cuatro autonomías del 151 se ha producido nunca la alternancia en el poder...
Movimiento de banquillo del PP en el Ayuntamiento de Sevilla. El popular Carlos Núñez ha renunciado a su concejalía para poder dedicarse de cuerpo entero a su tarea como diputado en el Congreso. Noticia interesantísima, gracias a la cual la gente se entera de que el PP tiene un diputado que se llama como el tío de la gaita y como el ganadero de bravo de la parte de Tarifa, sector Los Derramaderos. En el lugar del que se llama como el tío de la gaita han puesto a otro, cuyo nombre no hace al caso, porque tampoco lo conoce nadie. Es terrible la situación de perfil plano de la clase política andaluza. Quitando a Chaves, Zarrías, Pacheco, Teófila, el lamentable Gil, Antonio Romero y pare usted de contar, aquí nadie conoce a nadie. Nadie sabe quiénes son los diputados socialistas o populares por su provincia. Lo de los senadores, ni te cuento. ¿Ah, pero hay senadores por Andalucía? Salvo que voten con los pies, nadie sabe ni que existen. Entre los concejales, tres cuartos de lo propio, no hay un solo concejal andaluz que destaque por nada. Terrible perfil plano del que no se escapan ni los alcaldes. En Jaén no saben quién es el alcalde de Sevilla, ni falta que les hace. Ahora que la Junta y el Parlamento hacen balance de los veinte años de Estatuto, hay que reconocer que este perfil plano es una terrible consecuencia de la burocratización funcionarial de la política andaluza. Ni por muchos escándalos que le saquen sabe nadie quién es el alcalde de Huelva. Todo lo más llegan a pensar que se llama Don Pedro de la Isla y Chica. O Pedro de la Isla, que suena a cantaor paisano de Camarón y del Chato.
Concejala con burka
Nuevo cuento de Alhambra: "Y aquella concejala de Granada, cuando llegó el árabe Jeque Mengueleque, aceptando conforme a nuestras raíces culturales el relevante papel de la mujer en Al Andalus, se fue resignadamente a comer aparte, para no inquietar a los hombres, y dio las gracias a Alá porque no la obligaran a ponerse el burka, que se lo hubiera puesto con sumo gusto." No quiero ni pensar la que se hubiera formado si esa concejala llega a ser Amparo Rubiales. Cuando ha liado la que ha liado feministamente con el "hombres de luz" del Himno, si la llegan a poner en primer tiempo de harén es que habría ido por lo menos a Zaragoza a pedirle prestado el cañón a Agustina de Aragón...
El rollo del TBO
Con razón dice Antonio Romero que estamos en "la Andalucía del TBO". De momento, Magdalena Alvarez ha roto a hablar como los comics de la pomada. Proclama ante lo que me contaron ayer las lenguas de doble filo : "Hay buen rollo entre los miembros de mi Consejería". ¿Pero eso qué es? ¿La Consejería de Economía o una botellona?