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Me
llama Antonio Ybarra Llosent para darme el artículo hecho. Muy
temprano para este mes de horas tardías: lo menos a las 10 de
la mañana. Las 10 de la mañana es madrugada para el meridiano
de cualquier playa donde las amotitos de los niños y los
coches con las arradios a toda pastilla no te dejan dormir
hasta las mismas tantas. Me dice el tocayo Ybarra:
- Antonio, te llamo indignado, porque la otra mañana fui a la
calle General Polavieja a tomar café al antiguo Bar Navarro,
¿y qué te crees tú que vi que le han puesto a la escultura de
San José que hay en la fachada principal de la Capillita?
- Sí, unos compacdís cogidos de unas cuerdas. Vamos, que a San
José lo han puesto de DJ con los CD, de disyoqui con los
compacdís.
- ¿Y eso para qué es?
- Hombre, clarísimo: para que al pobre de San José no se le
caguen las palomas encima y acaben con la escultura de la
fachada principal de la Capillita. Los discos espantan a las
palomas porque creo yo que son CD de Falete. Las pobres
palomas, amenazadas por las canciones de Falete, salen huyendo
que se las pelan. Dicen «No, no, una canción de Falete, no,
por favor».
- ¿Y tú cómo sabías esto del San José de la Capillita colgado
de discos?
- ¡Qué preguntas tienes! Lo sé porque he hecho el Curso de
Modernidad y Progreso. Hay que estar preparado para todo: para
que derriben medio San Telmo, para que a San José le cuelguen
CD, para que hagan las setas en La Encarnación, y nada como el
Curso de Modernidad y Progreso. Si haces el curso, se te hace
el cuerpo y apenas te llevas disgustos.
-¿Y hay que estudiar mucho?
- En Primero se estudia Talante, Diálogo, Alianza de
Civilizaciones y Buen Rollito. Ah, y Gramática Progre, que es
donde te enseñan a decir lo de «ciudadanos y ciudadanas y
sevillanos y sevillanas», como si fueras Chaves.
- ¿Y Ciudadanía, no se estudia?
-Sí, en Segundo, pero antes tienes que aprobar Gramática
Progre. SiN haber aprobado Gramática Progre no puedes pasar a
Ciudadanía.
-¿Y en ese curso se estudia algo de Ecología Progre?
Y ahí es donde le expliqué a fondo a Antonio Ybarra la razón
de ser de la persecución de las palomas. Ahí es donde entran
los CD de San José convertido en DJ. La Ecología Progre nos
enseña que hay animales de primera y animales de segunda. Los
patos del Parque de los Príncipes, por ejemplo, son animales
de segunda. Sirven para dar de comer a los de primera: las
águilas reales, los ilustres linces de Doñana y los flamencos
rosas. Los flamencos rosas son como los farruquitos de las
aves: ni tocarles. Lo que no me explico es cómo estos señores
tan igualitarios hacen distinciones con los animales. ¿Por qué
quieren acabar con la aristocracia en los humanos y se
inventan una nobleza animal? Hay animales que viven como un
marqués, los dichos linces, flamencos y águilas reales,
mientras otros son animales chabolistas, animales simpapeles,
animales sin techo, como los patos del Parque de los
Príncipes, que son siervos de la gleba para que los animales
señoriales vivan a cuerpo de rey. ¿Cómo los que gobiernan
pensando en los descamisados, en materia de ecología sólo se
preocupan de los animales privilegiados? Eso sí que es
perpetuar privilegios, y no lo que acusan al PP con los ricos.
¿Usted lo entiende? Yo no. Como tampoco entiendo que sobrando
tantas palomas, que destruyen con sus cagadas las piedras
ilustres y la estatuaria pública, para dar de comer a las
ducales, marquesales y condales aves de rapiña tengan que
cargarse a los pobres patos. Ah, ya: patos del Parque de los
Príncipes, patos de Los Remedios... Vamos, patos del PP. Pues
que paguen el pato de las palomas.
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