Sábado 31:
Leopoldo, échame el toldo
La realidad
postelectoral es como una inmensa metáfora. Por ejemplo: la
metáfora de los que llaman toldos, para apaciguar la calor del
sol en las calles del centro. La parte andalucista del
Ayuntamiento saliente parece haber generalizado la Teoría Núñez
del "adiós, ahí os quedáis". Eso dijo la Gerencia de
Urbanismo a los comerciantes del centro, que como los unos se
habían ido y los otros aún no han venido, este año se quedaban
sin toldos (que así los llaman) en las calles. Después, como
marca la tabla, rectificaron, y ahora dicen que sí, que habrá
toldos, en cuantito se firme la prórroga del convenio con la Coca
Cola. Esto es lo más grande: que haya toldos (que así les dicen)
en las calles de Sevilla depende de una compañía de Atlanta. Y
dentro de la metáfora hay otra metáfora, como una muñeca rusa:
el nombre con el que oficialmente designan a esas lonas del
frescor, con las que Sevilla inventó el microclima hace muchos
siglos, sin necesidad de Expo, de fibra óptica y de pelotazo.
Esas lonas, en Sevilla, toda la vida de Dios fueron las velas.
Había velas en las calles y había velas en los patios. Era como
un homenaje a la cultura del muelle y del río. A la tarde, en los
patios, se oía la voz: "Niña, descorre la vela, que parece
que ya ha saltado la marea..." Bueno, pues a las velas estos
señores les han puesto el mote de toldos, en plan Leopoldo,
échame el toldo. Como están a dos velas en materia de velas,
Leopoldo no puede echar el toldo y tiene que esperar a que venga
la Coca Cola y nos pasemos a la modernidad, a "Currito, dale
al botoncito". Leopoldo y
Currito, dale al botoncito Currito da al botoncito
Subir
Viernes 30:
Adiós, Pepenúñez
Adiós, adiós, buen
viaje, adiós, que lo pases bien, recuerdos a la familia,
especialmente a su mujer, doña María Porras, cuya mano beso. Se
lo digo a usted con tanto cariño como respeto, don José Núñez
Castain, porque aparte de amigo usted es también guadalcanalense
consorte. Lo suyo de usted, Pepenúñez, ha sido como aquel pronto
con que Rafael de Paula se arrancó la coleta una tarde aciaga en
el Jerez de Pacheco. Pero ahora de verdad, porque Paula volvió.
Interpretaciones políticas aparte, a los que vamos por el plan
antiguo nos emocionan estos gestos de vergüenza torera: "Ea,
ya estoy yo en mi casa". Lo malo, don José, es el símbolo
de todo lo que se va con usted a su casa. Malo para su partido,
quizá bueno para Sevilla. Se va la Sociedad del Metro, y a saber
si no lo enterrarán otra vez. Se va la posibilidad de que
tengamos que pagar más estadios olímpicos donde quepa el ego de
quien usted sabe. Se va la Feria de San Miguel, y nos quedaremos
con la de Cruzcampo y rebujito, que es la nuestra. Se va la
cultura entendida como folkloreo. Se va la omnipresencia del
logotipo de color carmesí, confundido con el de su partido en sus
parcelitas y adosados del poder. Se va la caja registradora por
cuyo tintinábulo cambiaron algunos el "Andaluces,
levantaos", en un partido que se quedó sin ideología desde
que se murió el pobre de Pepe Aumente. Usted, don José, como le
sobra lo que les falta a sus compañeros "nolacos", vio
la voluntad de las urnas y oyó el "Andaluces,
levantaos". Y se levantó. Y fuése. Y no hubo nada. Me sigo
preguntando qué hace un señor como usted en un partido como
ése. Pepenúñez, el arquitecto de Una Sola Andalucía
El voto de Pepe Núñez
Subir
Jueves 29: Relevo
de autoridades
En Sevilla hay tres
grupos de autoridades. 1: las salidas de las urnas, como el
alcalde, los concejales, el desconocido presidente de la
Diputación, los barandas de la Junta. 2: los poderes fácticos,
salidos de unas urnas particulares que a la larga tienen casi
tanta fuerza como las políticas, como el presidente del Consejo
de Cofradías, como algunos hermanos mayores, como los presidentes
del Sevilla y del Betis. Y 3: las salidas de nombramientos que
aparecen en el BOE, como el capitán general, el teniente general
del Aire o el fiscal jefe de la Audiencia. De esos tres grupos,
estamos en periodo de cambios importantes en el primero y el
tercero. En el primero, tras las elecciones del 25-M. Y en el
tercero, por el tiempo en los destinos. En su segundo mandato, el
alcalde presidirá los actos con otro capitán general, otro
teniente general del Aire y otro fiscal jefe de la Audiencia. Se
van dos caballerazos militares: el teniente general don Fernando
Mosquera Silvén, que para nosotros seguía siendo el Capitán
General del Aire, con todo el aire de un estilo inconfundible; y
el teniente general jefe del Mando Sur del Ejército, don Rafael
de Valenzuela y Teresa, siempre a la altura de la significación
de su apellido, histórico en el servicio a España desde la
Legión o la Infantería. Y deja el cargo también el fiscal jefe
de la Audiencia, don Alfredo Flores Pérez, el muy cofradiero y
taurinísimo Alfredo Flores. Pero aunque cambien los concejales y
los capitales generales, los del segundo grupo de autoridades,
esos señores que no han acudido a las urnas ni han sido nombrados
en el BOE, seguirán mandando tela del telón, capitanes generales
con mando en Plaza... y en Campana.
Subir
Miércoles 28:
Don Enrique Sanchís
En seis días, dos
atracos en ese monumento comercial de la calle Sierpes que es El
Cronómetro. No está mal. Otros harán, seguro, demagogia: que si
éste es el modelo de ciudad que ha salido de las urnas; que si
así nos va votando lo que votamos; que si tienen la culpa los
guardias municipales; que no, que es asunto de los policías
nacionales. Dejemos la demagogia para ellos y hagamos nosotros
literatura. En ese atraco, los rateros han cometido una vileza con
un gran señor, caballero de la Real Maestranza del Comercio de
Sevilla: con don
Enrique Sanchís
García, que tiene los
cuatro apellidos probados por la nobleza del trabajo. Los
atracadores empujaron e hirieron a Don Enrique, que seguro que
estaba allí, al fondo, perfectamente vestido de traje y corbata,
con sus gafas de cerca, haciendo una factura, con el papel de
calco puesto en su vieja y perfecta máquina de escribir.
Si monumental es el establecimiento, más el señorío venerable
de Don Enrique, con elegancia de lord inglés. En toda la Bond
Street de Londres no hay un comerciante con más elegancia que Don
Enrique. Tiene casi tantos años como esta tienda, que es su vida,
donde se ha dejado su honrada vida de trabajo. La rectitud de Don
Enrique es tan exacta como los relojes repetidos de la fachada;
como ellos, nos marca un tiempo que nunca debe pasar en Sevilla. Y
como la tienda es su vida, Don Enrique baja a ella todos los
días. Que siga usted allí muchos años, Don Enrique. Por
supuesto que estos atracadores no son de aquí: nadie en Sevilla
se hubiera atrevido a darle un empujón al respetadísimo don
Enrique Sanchís. Jazmines en el ojal- La máquina de escribir del relojero
Subir
Martes 27:
Teodosio gana a Castelar
Decíamos ayer que
la Macarena le ha ganado a Triana en lo referente a la Alcaldía.
Y en materia de llaves, del Mister Minitt que da esa alcaldía,
añadimos hoy que la calle Teodosio le ha ganado a la calle
Castelar. El PA no se presentaba para ganar las elecciones, sino
la llave. Pero mucho antes de que se abrieran las urnas, la llave
del PA estaba ya en el fondo del mar. Lo de las urnas era un
pretexto para que Sánchez encontrara o la mayoría absoluta o un
nuevo socio, y lo ha hallado, al sacar IU un concejal más que
antes. Al PA ahora le dan la medicina de su propio bote, toma del
frasco: sus 41.805 votos valen menos que los 30.408 de IU. Raynaud
no ha perdido. Han perdido Núñez y la calle Castelar. Si en
España el PP logró desviar la marea del chapapote y la guerra,
aquí en Sevilla parece que fue Núñez quien hundió el "Prestige"
y quien declaró la guerra. El domingo Núñez se levantó como
Axataf, el rey moro de Ixbiliah, en el cuadro de Pacheco: con
Raynaud a sus pies, entregándole la llave de Sevilla. El cuadro
de Axataf fue a la noche pintado de otra forma: con Paula Garvín
entregando la llave a Sánchez. La llave que abre Urbanismo. A
Sánchez, vencedor, los suyos no le gritaban "¡alcalde,
alcalde!" en la noche del triunfo. Lo aclamaban al grito de
"¡Urbanismo, Urbanismo!". Por lo visto es muy
apetecible ganar Urbanismo y tiene que ser muy duro perderlo. Más
duro aún que levantarse alcalde de Sevilla y acostarse diputado
por Cádiz, contemplando además que Paula Garvín ha pegado su
pelotazo y ha recalificado la propia Delegación de Urbanismo.
Subir
Lunes 26: La
Macarena ganó a Triana
Si los que sostienen
a Triana son cuatro puntales finos, electoralmente son sólo dos
los puntales finos que sostienen a Sevilla a efectos de su
Alcaldía: Macarena y Sevilla Este. Una vez más, se demuestra que
ahí es donde se ganan o se pierden las elecciones en Sevilla. Y
ahora, con la maravilla del examen instantáneo del escrutinio
virtual, lo podemos ver con datos exactos. De los seis distritos
electorales que tiene Sevilla, el PP ganó en cuatro y el PSOE,
sólo en dos. Los datos del PP en sus cuatro distritos no crean
que fueron tan cortos: 54% de los votos en Triana; 52% en Casco
Antiguo; 43% en Nervión y 39% en Sevilla Sur. Pero fueron muy
largos sobre sus adversarios los votos que el PSOE sacó en
Sevilla Este (53%) y en Macarena (48%). En la Macarena, el PSOE le
sacó al PP un 26% de votos más; en Sevilla Este, nada menos que
un 34% de votos más. El PP limita, pues, al Norte y al Este con
el vivero electoral del PSOE, con la memoria de la Sevilla obrera
histórica. Como la democracia es la bendita democracia, y
números de las urnas cantan su hermosa canción, quienes de hecho
eligen alcalde son los votantes de Sevilla Este y de Macarena.
Pongan a Sánchez o pongan a quien pongan, sale quien digan en la
Macarena, no en Triana; quien digan en Sevilla Este, no en el
Polígono Sur. Esos dos distritos están encantados con Sánchez
como alcalde. Le queda a Reynaud el sentirse al menos alcalde
bastante pedáneo del Casco Antiguo, de Nervión, de Sevilla Sur
(donde están Las Tres Mil, no se olvide) o de Triana (donde
están Los Remedios, tampoco se olvide).
Subir
Domingo 25:
Novela para Eva Díaz Pérez
Primer capitulo:
jueves 22. 10 de la noche. Patio de la Montería del Alcázar. Lo
menos 300 personas mangando cena de gala a José Manuel Lara Bosch
con motivo del premio Fernando Lara. Entre los presentes hay
bastantes gorrones de la cultura traídos desde Madrid a gastos
pagados por cuenta de la casa. Segundo capítulo: viernes 23. 6 de
la tarde. Capilla Real de la Catedral. Apenas 80 personas en el
solemne funeral por el padre del editor a quien la noche antes lo
menos 300 comensales de la mejor sociedad de Sevilla y la mejor
cultura de Madrid y Barcelona mangaron cena de gala. Entre los
ausentes, hasta los gorrones traídos desde Madrid a gastos
pagados, que se fueron a la Feria del Libro y no se dignaron
aportar por el funeral del viejo Lara. Y lo más triste de todo,
el oficiante del solemne funeral, aquí el Amigo. Terminan las
exequias y antes de dar el pésame a la familia, aquí el Amigo va
que pierde la mitra a cumplimentar y pelotear a la consejera de
Cultura, que es de un partido que no cree en Dios y sí en el
aborto, y que horas antes le ha boicoteado electoreramente la
firma del convenio del Salvador. ¡Cómo le gusta a este
magnífico actor, virtuoso de la ojana, estar a bien con el poder!
¿Le estará diciendo a Calvo la misma falsedad prosocialista que
ha manifestado a la Prensa: "la fecha del convenio del
Salvador ha sido cuestión de mi agenda"? (Envío a Eva Díaz
Pérez: querida, estos dos capítulos y su corolario los pones en
300 folios, y en el 2004 no hay cubana de París ni guayabera de
Arcos que te quiten, como hogaño, el premio Fernando Lara.)
Subir
Sábado 24:
Casamiento
Como es jornada de
reflexión, hoy reflexiona y se casa un compañero y sin embargo
amigo de este cronista. La boda se celebrará en un pueblo de ese
Aljarafe en flor que está esperando carretas en esta secreta
Cuaresma rociera con cohetes de las hermandades al atardecer, al
violáceo y fresco atardecer de la mareíta que viene de la mar y
del Coto. Aunque a ese amigo que se casa le mandaremos nuestro
regalo, bien merece este otro público regalo de boda en forma de
breve billete de reconocimiento a su regusto por el lenguaje.
Porque en la tarjeta de convite, los novios ponen en sonoro
castellano: "Te invitamos a nuestro casamiento..." Ole.
Así se dice y se debe decir en Andalucía: casamiento. Así es
como en la hermosura del habla andaluza se le ha dicho toda la
vida de Dios a las bodas: casamientos. Nada de boda, y mucho menos
la cursilería al uso en los tarjetones de invitación:
"enlace matrimonial". Dices "enlace
matrimonial" y es que estás viendo la horterada de la
palomita en relieve que porta los dos anillos estampados en oro...
Por el contrario, dices "casamiento", y te suena sola la
copla popular de los campanilleros del Aljarafe, que ponemos aquí
como placa antigua en el disco del oyente, dedicada a los novios:
"En el cielo se alquilan balcones para un casamiento que se
va a hacer..." Y es que el novio que hoy se casa, como no se
casa con nadie a la hora de defender el habla andaluza en todas
las palabras que escribe en el periódico o dice por la radio,
tampoco se casa con nadie a la hora de redactar hermosamente una
invitación de casamiento, en el que seguro que no habrá más
arroz que el arroz y gallos muertos del convite.
Subir
Viernes 23:
Politiquerías
En la campaña que
toca a su fin, qué pena, siguen apareciendo, como siempre, más
recuelos totalitarios de la Sevilla Eterna como los que
comentábamos ayer. Se rasca un poco y sale donde menos te piensas
el sustrato racial del "vivan las caenas". Pero no
solamente sale entre nostálgicos de aquel régimen anterior donde
a las libertades les daban por la parte posterior, sino entre
protagonistas muy destacados del gozoso y presente sistema de
partidos de la Monarquía Parlamentaria que nos trajo S.M. El Rey
(q.D.g.). Vamos, que hay políticos profesionales y profesionales
de la política a quienes les sale el pelo de la dehesa del
campamento de la Organización Juvenil Española, ya que no
tuvieron edad para ser flechas del Frente de Juventudes. ¿Que por
quién va todo esto? Pues va por Sánchez, que en una entrevista a
medida que le han hecho en un periódico de su cuerda ha dicho una
frase que nos ha recordado más de lo conveniente a aquel dictador
que tuvimos en España durante una temporadita buena y a quien por
cierto recibía Sevilla entera sin que los guardias le pusieran
una pistola al pecho a nadie para que fuera a tocarle las palmas.
Le han preguntado a Sánchez cuál ha sido su mayor fracaso como
alcalde de Sevilla y ha dicho: "No haber conseguido alejar al
cien por cien la politiquería dentro del Ayuntamiento". ¿No
les suena esto a España Una, España Grande, España Libre,
cuando decían que al Ayuntamiento no se iba a hacer política?
Parece que al hasta ahora alcalde le hubiera dado su famoso
consejo el mismísimo dictador: "Sánchez, usted haga como
yo, no se meta en política..."
Subir
Jueves 22: Vaya
de la playa
La gente aborrece
las campañas electorales y larga fiesta contra las urnas. Aparte
de que afloran los totalitarios veneros del peligroso sustrato del
"vivan las caenas", los que tal dicen se pierden lo
mejor. Hay cosas en la campaña electoral mejores que un chiste de
Gandía. Como lo de la playa. Cada vez que hay elecciones
municipales, alguien sale diciendo que si gana nos va a hacer una
playa en el río. Luego, claro, gana el que tiene que ganar,
pactan lo que tengan que pactar, ponen de alcalde al primer
Sánchez que pasaba por la puerta y no se hace la playa. Ni falta
que nos hace. ¿Para qué quiere Sevilla una playa? A las urnas
municipales del domingo llegamos de nuevo con nuestra
correspondiente promesa de playa. Lo cual demuestra que hay una
crisis de ingenio en la famosa sociedad civil. ¿Por qué sólo
nos prometen la playa? Puestos a proponer, ¿por qué se quedan
ahí, en la orilla del recuerdo de la playa de María Trifulca con
garrafones de mosto y taparrabos, como en un libro de Nicolás
Salas? Los votantes deberíamos exigir más imaginación para
engañarnos. Deberíamos exigir que nos prometieran una estación
invernal, venga nieve, acarreada por los niños del carro de la
nieve. Nada le vendría tan bien a la barra de Robles como una
estación invernal. Podíamos hacerla aprovechando los terrenos de
Emasesa en El Carambolo. Por prometer que no quede. Se trata de
prometer de modo que nos casemos con un enano, salerito, y nos
hartemos de reír. Vaya de la playa...
Subir
Miércoles 21:
Qué cruz de cruces de mayo
En la ciudad que
perdió la medida va sonando el viejo pasodoble. Se llama
"Cruz de mayo" y es de antes de la guerra civil:
"Cruz de mayo sevillana,/cruz de mayo que en mi patrio
levanté..." La música es de Font de Anta, sí, el de
"Amargura". La letra es de Salvador
Valverde,
sí, el de "Ojos verdes"...
Cuando Sevilla la coreaba, las cruces de mayo se ponían en los
patios. Pero las cofradías siguen invadiéndolo todo en la vida
de la ciudad. De chiripa nos hemos librado de que alguna saque un
paso a la calle en estos días, aprovechando que están aquí los
escoceses del partido, ojú, de la UEFA. Porque no hay ninguna con
advocación que suene a escocesa o túnica de tartán, que, si no,
salía un paso a la calle, vamos que si sacaban un palio a la
calle. Como la moda de las Cruces de Mayo cofradieras. Ay, qué
cruz de cruces de mayo. Empezó la Madre y Maestra, con su
exaltación de la Cruz en el Jerusalén del compás de San
Antonio. Ceremonia sobria y medida, de jardín cerrado para pocos,
que este año ha tenido el regalo de la voz de Antonio García
Barbeito, que viene pidiendo atriles: atriles del Maestranza para
convertirlo en la Maestranza de la palabra con paladar literario.
Las demás cofradías han imitado a la Madre y Maestra, pero como
siempre, a peor: lo han sacado todo de canon y de quicio. La
capilla de Las Aguas de Dos de Mayo está de farolillos como una
feria: Cruz de Mayo. La Cena celebra su Cruz de Mayo con cosas tan
cofradieras como concurso de coplas, coro rociero y actuación de
payasos. No, si aquí de payasos...
Subir
Martes 20:
Cagancho y Curro Puya
En la plaza de Las
Ventas del Espíritu Santo, la Comunidad Autónoma de Madrid
descubría un azulejo en honor de Sevilla y su toreo, con el
nombre legendario del señor Francisco
Romero López y una frase certera y redonda pintada en la loza
como una media verónica suya. Ofrecieron el homenaje el sevillano
profesor Serrano Carvajal y el crítico Vicente Zabala de la
Serna, que, como su padre, muere con lo nuestro. Quiero decir con
ello que hubo mucha Sevilla en Las Ventas. El mejor homenaje a
Romero quizá se lo dio Zabala, yendo a las raíces trianeras de
su capotillo: Cagancho y Curro Puya. Y como estos enamorados de
Sevilla como Zabalita ven lo que nosotros no acertamos a
considerar, dejó allí el crítico, entre los arcos neomudéjares
de aquella estación de la Plaza de Armas a lo taurino, algo que
la ciudad ha olvidado y debe tener en cuenta: que estamos en el
centenario del nacimiento de Cagancho y Curro Puya. El señor
Joaquín Rodríguez Ortega, aquel que para Corrochano era una
escultura de Montañés con el capote, nació en Triana el 17 de
febrero de 1903. El señor Francisco Vega de los Reyes, aquel que
para Corrochano era un gitanillo de Triana al que se le paraba el
corazón cuando toreaba con el capote, nació en el arrabal el 23
de diciembre de 1904. No estaría de más que la llamada de
atención de Zabala llegara a Triana y que, por ejemplo, la Velá
de Santa Ana de este año estuviera dedicada a los dos grandes
toreros gitanos que Triana dio a Sevilla, al mundo y a las raíces
de ese capotillo con el que el señor Romero vendió la cal de la
esencia de toreo. Curro Puya
Cagancho
Subir
Lunes 19:
Explanadas sin jacarandas
Los ecologistas
protestan porque le han pegado un niquelado bueno y un entresacado
considerable a la ahora albertiana, por perdida, arboleda que
había ante el Parlamento Andaluz, antiguo Hospital de las Cinco
Llagas. No hay nada que peligre más que una masa arbórea ante un
monumento o un centro oficial, o más si es ambas cosas a la vez.
Recuerden la tala que Soledad Becerril hizo en los plátanos de
Indias de San Telmo, para sustituirlos por los arbolitos de
Navidad. Y casi peor que la antigua explanada del Hospital de las
Cinco Llagas ha sido lo de la explanada del Hospital Universitario
Virgen del Rocío. Este año, ay, no hay jacarandas florecidas
ante García Morato, porque talaron todo el jardín delantero del
Hospital, para hacer el aparcamiento subterráneo y lo que no es
el aparcamiento subterráneo, como ese juego de arquitectura en
plan Lego que han levantado allí para densificar todavía más
este monstruo hospitalario. Y frente, en la otra acera de Manuel
Siurot, con el mármol del mamotreto de la Consejería de Hacienda
ya nadie se acuerda del jardín de la Casa Sundheim que talaron
para edificarlo. Los dichos populares sevillanos hay que ponerlos
al día. En vez de "dura menos que una perra chica en la
puerta de un colegio" hay que decir: "Dura menos que un
árbol delante de la fachada de un centro oficial de la Junta de
Andalucía." En vez de tanta propaganda de la Agencia de
Medio Ambiente más les valdría agenciarse otra manera de
preservar el medio ambiente vegetal de Sevilla.
Subir
Domingo 18: Los
nietos de Pepe el Escocés
Para una vez que se
le busca una utilidad al Estadio que nunca fue Olímpico, ¡qué
terror la que se nos viene encima con la hinchada de la final de
la UEFA! Para una vez que el aeropuerto de San Pablo va a
funcionar a tope, como si fuera de verdad un aeropuerto, con la
llegada de 135 vuelos, qué miedo a que los que lleguen en esos
aparatos, hartos de beber y de tapear por Sevilla, la emprendan a
broncas y peleas. Observen que los portugueses nos dan menos
miedo. Son los escoceses los que nos aterran. Los nietos y
bisnietos de Pepe el Escocés,
aquel larguirucho enamorado de Sevilla que venía cada Feria con
su falda de cuadros y su malage bailando sevillanas y que
recuerdan hasta las coplas del Pali. Los nietos y bisnietos de
aquel escocés nos dan bastante más miedo que el abuelo o
bisabuelo, que a lo mejor ni se llamaba Pepe ni era escocés.
Nunca supo nadie la verdadera patria de Pepe el Escocés, ni cuál
era su gracia, aparte de bailar sevillanas con mucho malage y unos
brazos muy largos. Llega la hinchada de la UEFA en plena recta
final de la campaña, y veremos a ver si no vamos a tenerla. Lo
malo no es que rompan cristales, les tiren las sillas de los
veladores a los portugueses y abollen los coches con matrícula de
Oporto. Lo peor es que como haya las trifulcas callejeras que nos
tememos, ya verá usted la segunda parte del encuentro: el alcalde
responsabilizando al delegado del Gobierno y el delegado del
Gobierno diciendo que el estadio es del Ayuntamiento y no de Aznar.
Que Dios nos coja confesados y que si la lían, la líen por lo
menos ellos con ellos y allí en los alrededores del mal llamado
Olímpico, lejos del centro. Verdadera biografía falsa de Pepe el Escocés
(I) Verdadera biografía falsa de Pepe el Escocés (y II)
Subir
Sábado 17:
Libros en la Plaza
Igual que a tal hora
la Cruz en la Plaza en el programa de las cofradías, a todas
horas, en la Plaza Nueva, la cruz de la verdad de los libros.
Libros, libros, libros. La Feria del Libro es como una santa
Semana de los Libros. Asentados en el propio corazón de la
ciudad, está más Nueva la plaza que nunca con este esplendor de
la cultura que nos hace pellizcarnos, para ver si estamos soñando
o despiertos, ¿de verdad que estamos en Sevilla? Una caseta
(carpa suena a pescado de los pantanos) dedicada a Rafael
Montesinos y otra caseta dedicada a Manuel Chaves, naturalmente
Nogales. Un espacio dedicado a don Antonio, no Machado, sino
Domínguez Ortiz. Presentaciones van y firmas vienen. Escritores
en volandas en las fotos del periódico. Hombre, menos mal, hoy
salen en los diarios retratados más novelistas que hermanos
mayores y más poetas que flamencos de fusión. Ya era hora,
principio quieren las cosas. El viejo editor Lara, que ya no verá
esta Feria en su Sevilla querida de libros de Eslava Galán y de
Fundación rumbosa en la calle Fabiola, decía que no se quedaría
tranquilo hasta que los periódicos hablaran de los escritores
igual que de los futbolistas. Una vez al año no hace daño que
los diarios hablen de los escritores más que de los futbolistas.
Y apunten los animosos organizadores para el año que viene el
nombre de ese andaluz. No estaría nada mal que a la Feria del
Libro le pusiéramos en el futuro el nombre de José Manuel Lara.
Si miran la agenda de firmas de libros por sus autores, el ochenta
por ciento de esas obras han sido publicadas por editoriales del
grupo del sevillano.
Subir
Viernes 16:
Bellavista, sin vista
En Bellavista, hacia
el semáforo donde para y tiene su territorio siux el Indio de las
Tres Mil, está abierto entre el alcalde y el Gobierno central el
debate de bulevar sí o bulevar no, tras la desviación de la
N-IV. Mientras se hace el bulevar o no se hace, a la entrada de
Bellavista han cometido el clásico desafuero urbanístico
sevillano por el que nadie protesta, ni las perseverantes y
meritorias asociaciones ecologistas y del patrimonio-histórico. A
la entrada de Bellavista, en los que fueron terrenos de Uralita,
han construido lo más aterradores mazacotes de bloques de pisos
al lado mismo de la antigua Carretera Nacional IV. Vamos, que a
los que vivan allí les pasarán los camiones por debajo mismo del
balcón. Como se ha recalificado y edificado hasta el último
metro cuadrado posible, la Real Venta de Antequera, con toda su
gracia arquitectónica de la Exposición de 1929, queda ahora
semioculta por los bloques. Y no es caso único de tropelías
recientes. En la autopista de San Pablo pueden ver una operación
parecida con los antiguos terrenos de la Coca Cola. Y nada decimos
de las desaparecidas amplitudes de Nueva Torneo, con una hilera
más de bloques hasta el mismo filo de la calzada. Por lo visto se
trata de construir todo lo construible. Práctica que donde más
contradictoriamente llama la atención es en esa entrada de
Bellavista. A Bellavista de momento la han dejado sin vista. Ni
bella ni fea: no hay vista, sólo bloques de pisos a todo trapo.
Subir
Jueves 15: 901
101 900
Las campañas
electorales se caracterizan por la cantidad de esfuerzos que se
hacen y el dinero que se gasta y malgasta en convencernos de lo
que hay que votar, mientras no se toma nadie ningún cuidado en
algo más importante: decirnos dónde hay que votar. Mucha
abstención podría ser evitada, al menos la que llaman técnica,
si tomaran más trabajo en informar a los votantes de dónde
están censados. Llamamos al teléfono 010 de información
municipal para saber dónde tenemos que votar el día 25 y nos
dijeron que llamando al 901 101 900. Llamamos. Una maravilla. Un
señor amabilísimo nos pidió nuestro DNI y nos hizo unas
preguntas de comprobación de identidad como suelen en las
centrales de tarjetas de crédito: fecha de nacimiento y domicilio
actual. E inmediatamente nos dio no sólo la dirección exacta de
nuestro colegio electoral, sino hasta la mesa en que hemos de
votar. Tanta efectividad nos extrañó. Preguntamos al atento
operador del censo: "Oiga usted, ese servicio tan efectivo,
¿es del Ayuntamiento"? Nos dijo: "No, es del Ministerio
del Interior". Ya me extrañaba a mí que el Ayuntamiento
hiciera estas cosas... De las que hace, nadie se entera. Porque en
el 010 no dicen que también se puede ver dónde hay que votar en
los sitios que tiene el Ayuntamiento en Internet, casi secretos. Y
para que puedan ustedes verlo, en www.aytoestadistica.sevilla.org
o directamente en http://sevilla.tracasa.es/elecciones
, poniendo el nombre de la calle donde viven y el número de la
casa, le dicen el distrito, la sección y el colegio donde puede
estar censado. Puede, pero se queda sin saber si realmente lo
está con la seguridad que da el teléfono de Interior.
Subir
Miércoles 14: La
primavera perdida
En la ciudad en flor
cada vez se hace más verdadero el verso del viejo romance:
"Que por mayo era, por mayo,/cuando los grandes
calores..." Ahora, señores de los programas cofradieros de
la radio, ahora es cuando hay que hablar de climatología, y no
cuando llueve el Lunes Santo, que es la meteorología del día.
Hay que hablar de climatología porque hay que recurrir a los más
viejos del lugar para recordar desde cuándo en Sevilla no hay
primavera propiamente dicha. Será por el agujero de ozono o será
por el agujero del Metro, pero la verdad es que aquí se ha
producido un importante cambio climático que deberían estudiar
los marvizones de guardia. Sólo nos estamos quedando con dos
estaciones, no San Bernardo y Plaza de Armas como antes, sino
verano e invierno. El otoño de Sevilla, delicioso otoño de luz
dorada, cada vez dura menos y la pregonada primavera casi no
existe. A unos breves días de marzo es a todo lo más que podemos
llamar primavera. Estas calores mayas, que en cualquier parte del
mundo serían un verano en toda regla, es lo que nos queda de
primavera. Y perdonen que hablemos del tiempo, y escribamos este
nostalgiario de la primavera perdida en el cambio climático. Hay
veces en que hablar del tiempo es mucho más importante que
hacerlo de los eventos consuetudinarios que acontecen en la rúa.
Sobre todo cuando tales eventos son la pugna de los candidatos
municipales, a ver quién dice más chorradas a punta pala y a
caño libre para ganar mañana los titulares de los periódicos.
Subir
Martes 13: Al
canónigo Javierre
Querido Cura
Javierre: la que habéis liado entre Sor Angela y tú... De
momento le habéis dado a Sevilla una oportunidad más de sentirse
lo que es, y orgullosa de cuanto es. Y aunque tú eres el
postulador de su causa, se te olvidó anotar un principal favor de
Sor Angela a Sevilla: traer aquí al aragonés cura Javierre, que
iba a escribir su biografía. Ese libro "Madre de los
pobres" que todo el mundo ha copieteado en estos días, sin
citarlo, claro. Gracias a que Sor Angela trajo a Javierre para que
le escribiera su biografía, el cardenal Bueno Monreal pudo
entregar "El Correo de Andalucía" al cura que lo hizo
su "Correíllo" para acelerar desde sus páginas,
abiertas a la libertad durante la dictadura, el difícil paso de
Sevilla hacia la democracia. En los renglones torcidos con que
Dios escribe las cosas de la tierra de su Madre, ahora un
arzobispo de Valladolid ha concedido a un cura de Aragón el honor
de su nombramiento como canónigo de Sevilla. Javierre, que fue
decisivo para el difícil "fagamos una obra tal" de la
democracia, se merece la canonjía sobradamente. E incluso esa
Gran Cruz del Mérito Civil que no sé a qué espera Javier Arenas
para imponérsela. Y para nosotros, que nos metemos con los
canónigos cada lunes y cada martes, es una maravilla que Javierre
tenga asiento en coro en el Cabildo Metropolitano. Desde ahora,
Cura Javierre, nos meteremos con los canónigos con más ternura,
al saber que tú eres uno de los de colorado: el de colorado que
abrió "El Correo" a los rojos que queríamos la
democracia.
Subir
Lunes 12: Contra
la Sevilla unidimensional
Hay en Sevilla un
pensamiento perezosamente correcto, que no se replantea ninguna de
las ideas que circulan y las acepta como verdades intocables. Una
de ellas es la Sevilla unidimensional: cada una de las partes que
la componen se cree a sí misma la totalidad de la ciudad. Un
ejemplo: por la tarde, todos los que estaban en el rito
impresionante de la urna de Sor Angela se creían que esa es la
única Sevilla posible, sin pensar en los que a la misma hora
estaban viendo a Jarocho en la plaza de los toros; o estaban en la
Delegación del Gobierno viendo cómo Zaplana y Arenas imponían
la medalla de oro del Trabajo a Antonio Romero Monje y a Rafael
Ruiz Perdigones, vulgo Los del Río. O estaban todavía en las
motos de Jerez. O estaban aún en la celebración de la primera
comunión del niño. O habían estado por la mañana en el ingreso
de José María Vaz de Soto en la Real Academia de Buenas Letras
de Sevilla. Y volvemos al pensamiento perezosamente correcto,
resultado de la indolencia sevillana a la hora de pensar. Hablando
de Buenas Letras: despacito y con buena letra, esa institución
sevillana, con Rogelio Reyes y Jacobo Cortines al frente, se está
acercando cada vez más a la cultura más viva que se crea en la
ciudad. Buenas Letras no es un casinillo de vejestorios con frac y
condecoraciones, sino un senado de la mejor literatura, filología
y pensamiento de Sevilla. Que entre en Buenas Letras el sereno
novelista que tanto defendió la dignidad de las hablas andaluzas,
precisamente el día de la canonización popular de Sor Angela,
nos da una visión múltiple de Sevilla por encima de los tópicos
unidimensionales.
Subir
Domingo 11: Sor
Angela por la puerta grande
Se llama de la
Asunción, de los arzobispos o de los reyes. De la Asunción, por
el motivo representado en el tímpano de su ojiva gótica. De los
arzobispos, porque por ella salen muertos los titulares de la sede
de San Isidoro, esa que ahora no está en muchos aspectos a la
altura de San Isidoro ni incluso de las yemas de San Leandro. Y se
llama de los Reyes porque por aquí entraban los de España, antes
que Don Alfonso XIII, por la cercanía al Alcázar de su
residencia sevillana, pusiera de moda la Puerta de los Príncipes.
Hablamos de la puerta principal de la Catedral, que no es la de
San Miguel, por donde entran las cofradías, sino esta que está
al lado, tirando hacia la parroquia del Sagrario. Por esta puerta,
esta tarde, a una hora taurina, saldrá en triunfo la urna de Sor
Angela. Será como una Puerta del Príncipe a lo divino, ante esos
silencios que Sevilla ha derrochado en estos días. El triunfo
definitivo de un modelo de sevillana. Y será también como un
tercer domingo de Ramos. Decimos lo de tercero porque el segundo
fue la tarde que trajeron a Sor Angela hacia la Catedral, pasando
por El Salvador, que tuvo en las tocas blancas de las monjas los
capirotes blancos de los nazarenos de la Borriquita que este año
faltaron por la ruina de aquel templo. Qué maravilla esta Sevilla
del patrimonio inmaterial, perfectamente conservada. Qué
maravilla, esta Sevilla de siempre que no necesita salvadores: Sor
Angela saliendo por la puerta grande...
Subir
Sábado 10:
Emilio para Emilio
Este Emilio es, en
efecto, como un emilio, como un correo electrónico, dirigido al
único Emilio del toreo sevillano. Se dice Emilio a secas y no hay
que añadir Muñoz. Como Madrid es Madrid y Sevilla es Sevilla,
los aficionados a los toros de toda España se han quedado sin
poder ver por televisión las corridas del abono de la Feria de
Abril, ni aun pasando por la ventanilla de pago de las plataformas
(de aquella forma). Ahora, como Madrid es mucho Madrid, sí
podremos ver las corridas de San Isidro por las dos plataformas en
trance de fusión (cual cajas de ahorros sevillanas). Hasta que no
se han dado toros según Polanco y no según TVE no ha habido
toros por televisión. Y como Emilio Muñoz pisaba la raya de
picadores del polanquerío como comentarista taurino de las
retransmisiones de corridas de Canal Sur Televisión, lo han
contratado para que debute en Las Ventas como locutor
especializado. Hombre, a muchos nos gustaría más ver a Emilio
Muñoz en el ruedo, bajando la mano y abriendo el compás, y no
glosando la corrida desde el puesto de comentarista. Pero entre
Emilio y el del mechón blanco que se hizo famoso con el toro
blanco de Osborne, no hay color. Emilio seguro que no será un
servil eco de repetición de lo que vaya diciendo el otro:
"Este toro se acuesta por el izquierdo"; "Sí, se
acuesta"... "Ese muletazo ha tenido mucho temple";
"Sí que lo ha tenido..." Estamos seguros que Emilio no
será un lorito de repetición, y que llevará a Madrid la forma
de ver toros según Sevilla. Así que suerte, torero.
Subir
Viernes 9: Una
Sevilla de verdad
No eran las carretas
de Triana camino del Rocío, con los famosos y chiquilicuatres del
corazón llegados de Madrid para coger la vara florecida, la
medalla de cordón verde y la botella de cocacola para lavarse los
pies en el río Quema. No era ninguna de las cofradías de Semana
Santa, Gitanos o Esperanza de Triana, que hacen acudir como moscas
a los susodichos famosos del corazón. Tampoco eran los enganches
de la Feria, el interior de las casetas o la puerta del Príncipe,
que de pórtico de la salida a la fama se ha convertido en
alfombra roja a lo Hollywood para la llegada de toda calaña de
personajillos. Y como no era ni es nada de esto, sino que era y es
la Sevilla profunda de Sor Angela de la Cruz, la ciudad secreta de
sus ritos exactos, cumpliendo las medidas, las distancias, los
respetos y las convicciones, pues ni en los telediarios, ni en las
televisiones del cuchicheo ha salido nada referente a los actos en
torno a la sevillana del barrio de la Trinidad que ya era santa
mucho antes de que se enterara Roma, que la proclamó el pueblo,
ayuntamiento republicano de 1932 incluido, como en las coplas de
Miguel Cid: "Todo el mundo en general, a voces..." Y si
nada de Sor Angela ha salido por ahí y si ninguno de ésos ha
venido a figurar y a pintar la mona en lo de Sor Angela, ¿pues
saben lo que les digo? Que mejor... Ya es hora de que nos quedemos
nosotros con nosotros mismos, a solas con la Sevilla de verdad, de
uso interno, tras tanto manoseo de una Sevilla de mentirijillas
para uso externo.
Subir
Jueves 8:
Varilleros electorales
Tenía que haber
elecciones municipales más frecuentemente, porque es una
maravilla la velocidad que coge todo. Mucha más velocidad que ese
bólido que dice Chaves que es la Andalucía Imparable dando
vueltas por el circuito de las Españas. Sevilla, cuando llegan
las elecciones, pasa de ser Ciudad Incomparable a Ciudad
Imparable. Lo que estaba parado se pone en marcha y lo que estaba
atascado se desatranca. Llegan las varilleros electorales con su
bicicleta y con las largas varas amarradas en el transportín y,
zas, zas, lo ponen todo de una fluidez que asombra. Los varilleros
electorales han llegado al atasco de la fusión de las Cajas, le
han pegado dos lambreazos y tres chuponazos y mañana estará
aquello corriendo que se las pela. Los varilleros electorales han
llegado a la financiación del Metro y la Junta se ha echado para
adelante, poniendo sobre la mesa los 428 millones de euros de la
Linea 1, cantidad de la que otras instituciones, incluido el
Gobierno de la nación, pagarán su parte por el clásico
procedimiento del ya te veré. Decimos varilleros porque los
varilleros suelen actuar con las tuberías de aguas fecales, y en
estos tapones ahora electoralmente desatrancados hay mucha mierda
política. Por ejemplo, en lo del Metro. A mí nadie me quita de
la cabeza que por debajo de la mesa donde se han adelantado esos
428 millones para el oscuro túnel sin salida (Valle dixit) del
Metro hay determinados pactos no confesos sobre la futura
Alcaldía de Sevilla. Que ahí sí que haría falta un buen
varillero...
Subir
Miércoles 7:
Memoria del campo andaluz
Durante cincuenta
años, Mario Fuentes Aguilar ha retratado en Lebrija las bodas de
varias generaciones, las primeras comuniones de todos los
marineros, todos los almirantes y todas las niñas vestidas como
pequeñas novias del Pan de los Angeles. Podía haberse quedado en
fotógrafo de pueblo, pero tuvo la visión de hacerse por su
cuenta, sin patrocinios, cronista gráfico del campo andaluz.
Corresponsal gráfico de periódicos y agencias, le pidieron un
día un reportaje sobre la Fiesta del Racimo y le tomó afición
al campo. Retrató las mujeres de pantalones debajo de las faldas
y grandes sombreros de palma, cuando las cosechadoras no habían
llegado al algodón. Retrató una vendimia real de viñas y
albarizas, donde la reina era una jornalera de Lebrija cargando
las canastas de racimo en los serones de una mula. Así fue
reuniendo Mario Fuentes un archivo fotográfico que es, por sí
solo, un visual Atlas Etnográfico de Andalucía. La crónica
gráfica del campo que perdimos. Los sistemas de cultivo y de
riego ya abandonados, las caballerías, los aperos tradicionales,
las indumentarias de trabajo y los modos de vida en la marisma y
en la campiña están en las fotos de Fuentes Aguilar. En las que
no falta el retrato a caballo de Manuel Halcón, quien lo llamó
"fotógrafo de la Baja Andalucía". Ahora, el
Ayuntamiento de Lebrija lo ha nombrado Hijo Adoptivo. Llamamos la
atención a la Junta sobre la importancia etnográfica de su
archivo para el conocimiento de Andalucía, antes que venga un
americano rico y caprichoso, se lo compre y tengamos que ir a
Nueva York a ver esta impresionante memoria gráfica, que es como
"Las cosas del campo" de José Antonio Muñoz Rojas,
pero en fotos.
Subir
Martes 6: Prueba
de fuego
Seis y media de la
tarde. La hora en que empiezan los toros, la hora en que da el sol
a las cofradías de barrio cuando llegan a La Campana. A esa hora,
mañana, empezarán las celebraciones de la canonización de Sor
Angela según Sevilla. Ahora ya, en el manual de estilo de la
Santa Madre Iglesia, se escribe "Santa Angela de la
Cruz", pero en Sevilla se sigue pronunciando Sor Angela, y
así será siempre la calle que le puso el Ayuntamiento de la II
República, que es cuando tenía mérito. Y así, Sor Angela, la
seguirá llamando Sevilla en todos estos actos de aquí al
domingo, en que comprobaremos si todo se ha sacado de quicio por
parte de la jerarquía eclesiástica o si la ciudad, a pesar del
programa, lo sigue sabiendo mantener todo según sus cánones y
medidas. Atentos a esta prueba de fuego, en la que le podemos
tomar el pulso a muchas cosas de Sevilla. ¿Será todo como el
remedo de una coronación de la Virgen de una cofradía? ¿Cómo
quedará al final el traslado que querían hacer con el paso del
Santo Entierro los que no saben qué es Sevilla, o, sabiéndolo,
la desprecian? ¿Cómo será eso de que en la Catedral se venere
la urna de Sor Angela no lejos de la urna de San Fernando, colas
en el Patio de los Naranjos incluidas? Y al final, a la vuelta,
cuando la comitiva esté en el Ayuntamiento y salga el alcalde con
el ramito de flores de reglamento del protocolo, ¿recordará todo
a las carretas del Rocío del Salvador? Esperemos que no sea un
esperpento. No por nada, sino por el respeto que nos merecen Sor
Angela y su obra.
Subir
Lunes 5: Una
nueva tradición
En esta hora de
balance de la Feria 2003, la deducción mollar, a ojo de buen
cubero, es que todo ha funcionado bien en líneas generales, menos
lo que siempre fue como un reloj. No se produjo la aglomeración
temida del Puente de los Madrileños y no se notó en lo más
mínimo la crisis económica. ¿Crisis, dice usted? Aparte de los
datos económicos exactos que ajustados al céntimo nos dará como
siempre el Muy Estadístico Señor Emilio Carrillo, la impresión
que daba Sevilla es que aquí nadamos en la abundancia, cuyo
cuerno mandó al mismísimo cuerno a toda idea de crisis. ¿De
dónde sale el dinero para tantos caballos y tantos enganches?
¿De dónde para tanta caseta abarrotada, con una gastronomía
cada vez más refinada? No solamente estaba llena la Feria, sino
hasta el último bar del último barrio, ni había sitio en un
solo restaurante, los hoteles al completo... Perro frente a todo
esto que ha ido como una seda, queda lo que ha ido peor que nunca,
si ello es posible: el abono de los toros. Sevilla sigue siendo la
de siempre, pero la plaza de los toros, alias Real Maestranza, ya
no es lo que era. Mucho han tardado en aparecer las almohadillas
como signo de la hartura del respetable, mucho más respetable que
nunca por su estoicismo, por su forma de aguantar. Hasta los
cabestros han sido un desastre en la plaza de los desastres. Pero
no se preocupen: nadie tomará ninguna medida ni nadie hará nada.
Y la ciudad que todo lo traga convertirá en tradición esto de
que cada tarde salgan 9 toros y que no se vea nunca nada de nada,
con una orejita de tómbola de vez en cuando.
Subir
Domingo 4:
Tópicos sobre Sor Angela
Sevilla se las pinta
sola para inventar tópicos. Como tenemos tan buen oído, alguien
dice una frase genial, gusta al respetable, los habituales
ladrones de oreja la hacen suya, como si se les hubiera ocurrido a
ellos, la repiten una y mil veces, y ya tenemos un tópico en
marcha. Observamos que Sor Angela de la Cruz llega en este domingo
de Feria a los altares donde ya estaba con una buena carga de
tópicos. El primero es justamente ése: que Sor Angela no llega a
los altares, sino que ya estaba en ellos, proclamada santa por los
sevillanos hace muchísimos años, desde el mismo momento de su
muerte, cuando un Ayuntamiento republicano y laico decidió darle
su nombre a la calle Alcázares donde estaba su convento y donde
murió. El segundo tópico se refiere a su nombre: dice que aunque
el Papa le llama Santa Angela de la Cruz, los sevillanos le
seguirán diciendo Sor Angela de la Cruz, con lo que podemos
llegar a la conclusión de que en sevillano se escribe "Santa
Angela", pero se pronuncia "Sor Angela". El tercer
tópico es sobre el lugar donde la canoniza el Papa. Dice el
sevillano que acaba de sufrir la invasión ferial de los cien mil
hijos de Madrid que hasta que ha llegado la sevillana Sor Angela
allí al altar de la Castellana no va a ser verdad eso que ellos
dicen: "De Madrid, al cielo". Al fin y al cabo, Sor
Angela es tan sevillana que para arreglar este asuntillo de
papeles de que la Iglesia la reconociera como santa ha tenido la
pobre que ir a Madrid.
Subir
Sábado 3:
Propósitos para la Feria 2004
Será con los ojos
que lo vemos, pero nos parece que este año, a pesar de la
habitual proliferación de enganches y de los embotellamientos de
carruajes, ha habido más caballistas en el llamado paseo de
caballistas. Esto de la escasez de caballistas en la Feria era una
de las clásicas contradicciones barrocas de Sevilla. Estábamos
llegando a un punto de incoherencia en que en el paseo de
caballistas había de todo, menos caballistas: carretelas, milords,
piters, breaks, sociables, landós, vis a vis, manolas, y apenas
una docena de jinetes y casi ninguna amazona. Como quiera que
anuncian que el año que viene ya no dejarán entrar a los carros
de doma, porque esto no es el camino del Rocío, quiere ello decir
que si las cosas siguen así, se recuperará la tradición de los
caballistas, del mismo modo que el Real Club de Enganches salvó
el esplendor de los carruajes en la Feria. Y ya que Ignacio
Sánchez-Ibargüen hizo el elogio del caballista perdido en su
pregón de la Feria, si seguimos su consejo y conseguimos,
además, que los caballistas no vayan con la caña del vino
colgada como un escapulario, como a la Feria, no como de romería,
pues los sevillanos volveremos a ser lo que fuimos en materia de
paseo mañanero por el Real. Y si en vez de a las 4 de la tarde
aquello se empieza a animar por lo menos a las 2 es que ya ni te
cuento...
Subir
Viernes 2: Otra,
otra, señor alcalde
Parecía que Sevilla
tenía un encefalograma cívico plano y que había dejado de
reaccionar ante los estímulos exteriores, instalados sus vecinos
en el aquí-me-las-den-todas de su conformismo secular. Que a la
ciudadanía le traía sin cuidado la campaña electoral en
puertas, el rataplán del Plan Estratégico, las estrategias sin
planes, la degradación colectiva, la pérdida de identidad. Hasta
que habló el alcalde y subió el pan. Sevilla sigue existiendo,
porque sigue gritando, y cómo, cuando le pisan un callo. Y el
alcalde le ha pisado a Sevilla el callo que le había salido en el
alma, cuando dijo aquello de que nos fuéramos todos a la playa y
dejáramos la Feria a los forasteros. Las declaraciones han sido
comentadas y rechazadas hasta en el último rincón de la última
barra del último bar. Me entusiasma la reacción de la ciudad
ante lo que dijo el alcalde. Reacción sevillanísima:
"¿Quién, nosotros a la playa? ¡Que se vaya este tío con
tós sus...!" La reacción ante el agravio comparativo ha
sido como una versión en albero del 28-F. Sevilla es así. Parece
que está dormida, como la copla de Juanita Reina sobre Joselito,
pero cuando se despierta y dice "aquí estoy yo" es
terrible. Por lo cual estamos por pedir al señor alcalde que, por
favor, siga diciendo tonterías, para que Sevilla siga existiendo.
Gracias a la respuesta a las tonterías que dice el alcalde
comprobamos que Sevilla existe. Por favor, señor Sánchez, cuanto
antes: otra, otra...
Subir
Jueves 1: Las
otras luces de Feria
Hay unas luces de
feria a las que ningún coplero dedicó una mala sevillana. Por
eso le reescribiríamos la sevillana clásica de Lope de Vega:
"Ay, taxi de la Feria,/qué bien pareces/cuando te encuentro
libre,/con tu luz verde". Luces verdes ansiadas en noches de
farolillos, de pies cansados, de cuerpos rotos, deseandito llegar
a casa. Luces que cuando las ves te dan una alegría absolutamente
indescriptible. Si hay un bien preciado a la hora de ir a los
toros con las entradas de un abonado que prefirió seguir en la
caseta y regalarlas, es el taxi libre, bien ciertamente escaso
cuando dan las 6 de la tarde en el Real. O luego, a la noche, las
luces verdes en la cola de los taxis de Ramón de Carranza. O las
clásicas peleas de Feria, por ver quién vio primero el taxi
libre. Todos los aspectos de la Feria han sido glosados, y nadie
se ha acordado nunca de los taxistas que trabajan para que otros
se diviertan o para quienes, rotos, quieren llegar cuanto antes a
su casa o a recoger ese coche que dejaron cerca de La Rinconada
porque no encontraban otro aparcamiento. Y a la noche, el más
desconocido paseo de carruajes: las luces verdes de los taxis,
calle San Fernando abajo, Puerta Jerez arriba, camino de la Feria,
a recoger clientes, en esa lanzadera nocturna que los taxistas se
montan por su cuenta entre Nervión y la Feria, entre el Polígono
y la Feria, entre Sevilla Este y la Feria. Las verdes luces de los
taxis y las casetas de las paradas de Tussam en El Prado y en
Carrero Blanco son esa Feria real que está pidiendo a gritos un
letrista de sevillanas.
Subir
INDICE DE ANTERIORES TEXTOS DE ABEL INFANZON "LA ESE
30"