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Hace
tiempo que en Andalucía no se habla del agravio comparativo,
que es nuestra principal seña de identidad. Nuestra identidad
no es el subdesarrollo perpetuado desde los tiempos del libro de
Alfonso Carlos Comín que el otro día citaba la señora
Martínez en el Parlamento Consola de Juegos, donde Chaves
jugaba con su Mirusté.
-- ¿Su Mirusté? ¿Qué juego es ése del Mirusté?
El Mirusté es el juego parlamentario preferido de Chaves en
la Consola de Juegos del Parlamento Gameboy. Coge Chaves el
Mirusté y echa la tarde con el Mirusté:
-- Mirusté, señora Martínez, que si patatín, mirusté,
señora Martínez, que si patatán...
Y así, réplica, dúplica, y contrarréplica, qué juego le
da a Chaves el Mirusté... Así que venía diciendo que la
principal seña de identidad de Andalucía no es el
subdesarrollo, ni los orígenes romanos de su cultura, ni las
raíces del esplendor de los Omeyas. Ni los elementos de la
identidad excedente que decía Castilla del Pino, los que
Andalucía presta a España como símbolo; ya saben, la
Industria del Folklore: cante, vino, caballos, toros, flamenco.
La principal seña de identidad andaluza es el agravio
comparativo. Andalucía no la inventó Blas Infante, como dicen.
Fue Lauren Postigo, cuando dijo aquello de "andaluz, éste
no es tu referéndum" y el andaluz, agraviado, dijo:
-- ¿Que éste no es mi referéndum? Pues ahora te vas a
enterar de si es mi referéndum o no es mi referéndum...
Fue en realidad el referéndum de Escuredo y del PSOE, pero
eso es otra cuestión. Fue la constatación de que el
"andaluces, levantaos" del himno es con condiciones:
el andaluz se levanta si le tocan los co...pí, pí, pí. Pero
últimamente ni eso. Ya el andaluz no se levanta con agravio de
vascos ni afrenta de catalanes. Por no levantarse, ni con las
Cajas. Ni con los créditos de las Cajas.
La Caja San Fernando dice López Benjumea que está como
Salvi Domínguez: chunga de papeles. Que no están ni se les
esperan los papeles del crédito que le dieron a Chaves y que no
pagó. Este es el agravio. Me extraña que no funcione el
"andaluces, levantaos" por este agravio. Millones y
millones perdonados por la Caja, sin que pase nada, por el mero
hecho de ser Chaves, por tener un Mirusté:
-- Mirusté, señor López Benjumea, yo no pienso pagar...
Pero si usted no se llama Chaves y tiene un crédito
pendiente con la Caja y no paga, aviado va. De momento le
embargan el sueldo y después le embargan el piso. ¿Le ha
embargado el sueldo a Chaves la Caja por no pagar el crédito?
¿Le ha embargado su piso de frente al Campolbetis? No, padre.
¿Y por qué se lo embargan entonces al trabajador, votante de
Chaves quizá, que, asfixiado, no puede pagar el crédito? Esto,
Pero Grullo puro de oliva, Pero Grullo cinco jotas, etiqueta
negra, es lo más sangrante de toda esta mangoleta. Este es el
verdadero agravio. ¿Con qué cara va la Caja a embargar ahora a
nadie por impago, estando ahí la morterá que le han perdonado
a Chaves y al resto de la partida? Cualquiera puede exigir que
su crédito pendiente esté al menos tan chungo de papeles como
el de Chaves. En la puerta de San Telmo hay un agente de la
Policía Autónoma. Tenía que haber un Cobrador del Frac. ¿O
han amenazado también con suspender de militancia al Cobrador
del Frac?
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