|
Pasada
la Semana
Santa, es tradición de la prensa sevillana pasar revista a
cómo ha sido la gran fiesta. Cumplamos la tradición.
Considerando el propio concepto de tradición. ¿De verdad es
Sevilla una ciudad tan tradicional como dicen? Lo dudamos. Más
que tradicional, es novelera. En ningún sitio del mundo hay,
como aquí, tradiciones con estrenos. La tradición es lo
inalterable, lo ritual. Aquí siempre hay quien quiere
cambiarla. Si se quiere mantener una tradición, no hay más
remedio que innovarla. Ponerla al día, que le dicen. Añadirle
el carácter de estreno. No en balde lo más tradicional empieza
con la proclamación del amor por las novedades: "El
Domingo de Ramos, el que no estrena, no tiene manos". Y la
tradición, en este punto, no es manca...
Era la Madrugada. Pasaba la Centuria Romana de la Macarena,
hermandad que en su tradición estrenaba nada menos que mujeres
nazarenas. Pero es que los viejos sonidos de la banda de la
Centuria no se oían por parte ninguna. Ni "La
Paloma", ni "Mayor Dolor", ni ninguna de las
viejas marchas. ¿Habrá algo más tradicional que los armaos?
Pues ya no suenen en absoluto de modo tradicional. La banda de
la Centuria toca ya igual que la banda de las Cigarreras, ¿es
esto la tradición? Pero es que, a su vez, todos largan contra
las llamadas agrupaciones musicales, aquella tan denostada de El
Arahal, y las bandas más tradicionales han tomado el sonido
Arahal. Todas suenan a Arahal.
Si estuviéramos en una ciudad tradicional, se cuidaría la
calidad de las saetas, cada vez más escasas y peores. Y se
cuidaría que, por ejemplo, detrás de un palio perfecto no
fuera el aguador de la cuadrilla con un espantoso contenedor de
plástico en lugar de un cántaro.
Para que algo sea tradicional, basta que alguien lo proclame,
que todo el mundo se lo cree. Dogma de fe. Ya son tradicionales
los GPS de las cruces de guía, las mamparas. De la tradición
de la bulla como suprema norma de comportamiento colectivo hemos
pasado directamente a la tradición del miedo a las bullas. De
la tradición de la bulla a la tradición de la valla.
Si todo en la ciudad está degradado, ¿por qué habría de
mantenerse intacta la Semana Santa? Ya apenas queda la plaza de
toros. Hasta allí es falsa la tradición. No sé si con la
nueva imagen, la botella de Tío Pepe sigue diciendo aquello tan
bonito que inventó el publicista Pérez Solero: "Sol de
Andalucía embotellado". En la plaza de toros de Sevilla
hemos logrado el sol entaquillado. El anuncio de "Currito,
dale al botoncito" ya no podrá poner el pregón de
"la sombra, la sombra vendo". En las tarifas de
precios de los carteles ya no pone ni "sol", ni
"sombra" ni eso tan nuestro y tan contradictoriamente
barroco de "sol y sombra": números de tendidos y
listo. Y a las 7, a mayor honra y gloria de la taquilla. La
tradición del sol de Feria ha sido sustituida por corridas que
son nocturnas casi al 50 por ciento. El año que viene, la
tradición de la plaza serán los focos encendidos. El Domingo
de Resurrección, acabada la corrida, el Rey se quedó como
esperando, sin decidirse a salir. Lo lógico es que lo hubiera
despedido la misma Marcha Real que lo recibió. Nada. El
Rey se fue de la plaza como si fuera un señorito particular
invitado por el Conde de Luna.
Es que aquí somos muy tradicionales.
Por las que hilan.

Triana
en la "Guía Secreta de Sevilla"
Triana:tradiciones
escritas en el palo de la cucaña
LA
FERIA
OTROS
RECUADROS DE SEMANA SANTA
ARTICULOS
SOBRE SEVILLA
SOBRE SEMANA SANTA 2001 EN
INTERNET:
- AndaluNet, Semana Santa 2001
"Er Pograma" ya tradicional, con el
Pregón de Carlos Herrera .
- Pregón
de Semana Santa de Carlos Herrera Ofrecido por ABC y El Monte.
- Especial
Semana Santa en ABC Sevilla Con programa, fotos antiguas y Antología
de textos
Artículos
de día anteriores
Hemeroteca de
artículos en la web de El Mundo
Biografía de Antonio Burgos
Libros
de Antonio Burgos en la libreria Online de El Corte Inglés
Libros
de Antonio Burgos publicados por Editorial Planeta -
|