Clic para ir a la portada

El Recuadro   

 Antonio Burgos

ANTONIO BURGOS | EL RECUADRO


El 4 de diciembre, de 1977 a 2004

Lo que tenía que haber hecho Manuel Marín era dejarse de pompa y circunstancia y celebrar el Día de la Constitución en el Estadio Olímpico de Sevilla. Aquí le hubiera salido redondo. A Marín le falló la grada incondicional de las minorías que dan al Gobierno el apoyo necesario para que, entre otras cosas, él sea presidente del Congreso. El Jugador Número 12 de la Constitución son el PSOE y el PP, pero los primeros, más que por ganar la ensaladera de otros veinticinco años de vigencia de su texto, están por la ensalada de reformas, y a las propias palabras de Marín me remito.

Contemplo el bosque de banderas de España en la final de la Copa Davis desde una perspectiva histórica andaluza y me quedo perplejo y pensativo. La Copa Davis, en verdad, se ganó el sábado 4 de diciembre, cuando Carlos Mollà obtuvo el segundo punto ante Mardy Fish. Las audiencias de TV lo confirman. Ese 4 de diciembre de 2004, Sevilla se llenó de banderas de España. Banderas con el escudo constitucional, banderas con el escudo apócrifo del toro de Osborne, la España de la Bahía de Cádiz. Banderas en las bufandas, en los gorros, banderas pintadas en las caras de la chavalería.

Este 4 de diciembre de banderas de España en Sevilla yo me acordaba de otro 4 de diciembre, para algunos fecha histórica: el 4 de diciembre de 1977. Tomo de la biblioteca un viejo número monográfico de la revista «Primera Página», titulado «Andalucía altiva». Evoco las manifestaciones multitudinarias de aquel día, pidiendo la autonomía plena, lo que luego habría de ser la rebelión del referéndum de un 28-F en que Andalucía, por voluntad popular, quebró el modelo de las autonomías de primera para Cataluña, Vascongadas y en todo caso Galicia y para las restantes regiones, recuelos y sobras de segunda mesa. Como en su lema Andalucía proclama que es «por sí, para España y la Humanidad», aquel 4 de diciembre de 1977 nuestra tierra pidió café-café, café sin recuelos, no achicoria, para sí, y, de paso, para la Humanidad de todas las regiones de España. Aquel 4 de diciembre comenzó la conocida historia del «café para todos» y Manuel Clavero, ministro de las Regiones con Suárez, enchufó la máquina para empezar a repartir solos y cortados hasta el último confín patrio. (Terminado el servicio de desayunos en la España de las Autonomías, hay quien asegura que la vieja máquina del «café para todos» de Clavero fue reutilizada por Mienmano para dar y cobrar sus famosos cafelitos en la Delegación del Gobierno de Felipe González.)

En aquel 4 de diciembre de 1977 del que se ha olvidado hasta que murió un malagueño, García Caparrós, por poner la bandera andaluza en sede gubernamental, no había por toda Sevilla una sola bandera de España en las calles recorridas por medio millón de manifestantes. Sí, había una: en el balcón de Fuerza Nueva, anidado de matones con porras y cadenas, la bandera del pajarraco franquista. No era una bandera. Era un desafío a la democracia. Veo ahora en esa revista la foto de otros balcones colgados con la bandera de España. Un manifestante trepa hasta ellos y las quita. Dice el pie de la foto: «Ante las provocaciones, las banderas españolas van siendo arrojadas al suelo al paso de la manifestación. Se corea: «Sólo queremos banderas andaluzas»».

¿Qué ha pasado, de 1977 a 2004, con este flamear de banderas en Sevilla, antes andaluzas, ahora españolas? Para defenderse ante Cataluña y Vascongadas y no ser menos que nadie, los andaluces levantaron la blanca y verde el 4-D de 1977. Desilusionados con la autonomía que iba a ser la utópica panacea, el 4-D de 2004 han levantado la bandera de España. ¿Por la Copa David? ¿O de nuevo por sí, contra los que quieren ser más que nadie, por este España que no remedia ni la Humanidad?





Recuadros de días anteriores
 

Correo Correo


Clic para ir a la portada  

Biografía de Antonio Burgos  

Libros de Antonio Burgos en la libreria Online de El Corte Inglés




 

 


 

 

 

Copyright © 1998 Arco del Postigo S.L. Sevilla, España.

 

 

 

¿Qué puede encontrar en cada sección de El RedCuadro ?PINCHE AQUI PARA IR AL  "MAPA DE WEB"
 

 

 


 

Página principal-Inicio