-- ¿Donde el terciopelo de los mantos de las Vírgenes?

Allí mismo. Y por casualidad no se fueron donde la tela de las túnicas de cola, a Ruán. Que son las dos grandes aportaciones textiles de Francia a nuestra Semana Santa: Lyon y Ruán. Cuando los Hidalgo se fueron a Lyon, Anne tenía dos años. O sea, que ésta ha vivido en San Fernando todavía menos que Antonio Machado en Sevilla; así que no me venga con que su infancia son recuerdos de un plato de bienmesabe. La ya alcaldesa parisina estudió Trabajos Sociales e hizo algo que Susana Díaz no ha hecho en su vida: unas oposiciones. A inspectora de Trabajo. Y las ganó. Y ya medio puretona, con 35 años, se apuntó al Partido Socialista, no como la otra, que empezó desde niña a trepar en el PSOE. Y entonces fue cuando, en plan Bibiana Aido, se dedicó Anne al asunto de la Igualdad, aunque sin que le dieran un ministerio que Igual Da que exista o que no exista. Trabajó en tres ministerios y luego la pusieron de número dos de Bertrand Delanoë, el alcalde de París que salió al mismo tiempo de las urnas y del armario, porque proclamó que era parguelón y que veía a un coracero de la Guardia Presidencial y se la caían dos lágrimas. Desde que tenía 14 años Anne es francesa de toda francesidad. Ella y sus padres. Que al nacionalizarse franceses le pusieron Anne en vez de Ana, y que, ya jubilados, luego se volvieron y viven ahora en Chiclana. Hace diez años, Anne se acordó de su tierra cañaílla, y pidió la doble nacionalidad española y francesa, que ahora tiene.

¿Un triunfo de la Marca España en París? Sí, porque a la isleña no se le caen los anillos por decir que le gusta el flamenco y que es mucho de su paisano Camarón, de la paella y del gazpacho.

-- ¿Y del bienmesabe no?

Es que los franceses no saben lo que es el bienmesabe, por eso son francesas. Si lo supieran, los hubieran elegido a todos alcaldesos de París. Allí al que sabe lo que es el bienmesabe lo ponen de alcalde en París. Triunfo que creo es resultado de la presión del "lobby" cañaílla de Pepe Oneto y Enrique Montiel, que han dado un por saco importante en París hasta que han conseguido poner a una paisana.

Esta, pues, no es Susana. Pero advierto que como Susana Díaz y los suyos sigan con esta política de desamparo de la juventud en Andalucía y los chavales sigan teniéndose que ir a trabajar al extranjero, tendremos alcaldesas andaluzas no sólo en París, sino en Francfort y en Londres. En 2013, dos mil gaditanos jóvenes se han tenido que ir a trabajar a Alemania o a Inglaterra. Como los Hidalgo en la dictadura, igual, pero ahora con Junta de Andalucía. Muchos de esos chavales se quedarán para siempre en Alemania o en Inglaterra, porque aquí no hay currelo ni esperanza de encontrarlo. Allí se casarán y allí nacerán sus hijos. Quiere ello decir que dentro de cuarenta años no sería de extrañar que otra Anne Hidalgo nacionalizada alemana sea alcaldesa, un poner, de Berlín.