Entre don Fernando Ortega Martel, ilustre vecino del Arenal, y servidor tenemos montado un Observatorio y un Centro de Interpretación. Como los que pone la Junta para colocar enchufados y paniaguados, y en los que se gasta un dineral. Pero lo nuestro es "sin trincar", que decía El Beni. No le costamos un duro a la Junta. Tenemos montado el Observatorio de las Cigüeñas de la Chimenea de la Maestranza de Artillería en la calle Dos de Mayo y el Centro de Interpretación de los Signos De Que Esto Ya Está Aquí; siendo "esto" la primera en La Campana. Cuando se acerca el día de San Blas o la Candelaria de su querida Hermandad del Rocío de Triana, cada año, ritual, puntual, solemne, emocionado, recibo la mañanera llamada de don Fernando Ortega:
-- Antonio, que ayer ya llegaron nuestras cigüeñas a la chimenea de la Maestranza de Artillería.
Y sé que está proclamada la primavera. Don Fernando Ortega es un sevillano clásico, currista militante, hermano de instituciones de la mejor cahizada, como la Sacramental del Sagrario o la Pura y Limpia del Postigo. Y me pega (aunque no se lo he preguntado, porque todos los hermanos lo llevan con humilde sigilo, según Mañara) que es también de la Santa Caridad. Todo sin salir del barrio. ¿Que por qué hablo de don Fernando Ortega? Por dos razones: la primera, porque me da la gana. La segunda, porque 4.000 Fernandos Ortega era lo que necesitaba el toreo en Sevilla para que se acabaran las duquelas negras de las dificultades económicas de la empresa de la plaza de los toros (seguimos sin salir del barrio) y para que don Ramón Valencia no nos diera la pena, penita, pena que me dio antier noche, oyéndolo en el programa de Manolo Molés. La Feria taurina de este año ha sido un éxito artístico, pero una ruina económica.
Don Ramón Valencia a toíto el mundo ha confesado en el Toreo que la Feria de Sevilla, tal como está planteada, es económicamente insostenible. En la taquilla no es que haya llovido: han caído chuzos de punta. Y a pesar de la vuelta de las figuras boicoteadoras y del tirón de los toreritos emergentes, el abono no ha subido. Bueno, sí, ha subido, pero media pringá: sólo 169 nuevos abonados. En total hemos sido 2.335 abonados apoquinantes. Y para la sostenibilidad económica de carteles de calidad hacen falta 4.000 abonados como mínimo. No ya aquellos 7.000 que hubo cuando la Expo, que cada empresa se mercaba diez barreras para regalar entradas como relaciones públicas. Entre la crisis del 2008 y el boicot de las figuras, se cargaron el abono taurino de Sevilla. A mí me da envidia ver esa plaza de Madrid con un llenazo cada día en San Isidro, por muy chungo que sea el cartel. O contemplar ayer la foto de la gente haciendo colas ante las taquillas de Las Ventas. ¿Es que no hay afición en Sevilla? ¿O a lo que no hay afición es a gastarse el dinero en los toros, por muy atractivos que sean los carteles? ¿O es que el sevillano presume de ser aficionado a los toros y luego lo ve por Canal Plus, si es que lo ve? Por eso don Ramón Valencia, para mantener la categoría de la plaza, necesita 4.000 como Fernando Ortega. Por el programa de mano que los chavales que quieren ser toreros entregan en la puerta 7 me enteré, en una semblanza que el día de los Miuras le escribía Mario Vara, que mi compañero de Observatorio de Cigüeñas lleva 63 años ininterrumpidos, 63, (que se dice pronto) como abonado de la plaza de Sevilla. ¿Es el decano de los abonados? Yo creo que sí. En su Grada del Arte ha contemplado media historia del Toreo del siglo XX y de lo que va del XXI. Y sin presumir, como somos la gente del Arenal. A Fernando Ortega la empresa Pagés y el toreo le deben un homenaje y la Medalla de la Constancia. Que es justamente lo que le falta a don Ramón Valencia: 4.000 Fernandos Ortega constantes y sonantes que impidan que la plaza sea, al mismo tiempo, una maravilla... y una ruina en las condiciones actuales, ya que solamente el IVA (21% del cargo de taquilla) y el Pisoplaza Maestrante (22%) cobran más que si toreara todos los días José Tomás.
Si quiere usted enviar algún comentario sobre este artículo puede hacerlo a este correo electrónico
Correo
