ANTONIO BURGOS | EL RECUADRO


ABC de Sevilla, 27 de abril  de 2022
                               
 

Venecia "pay per view"

Mucho hablamos de la España Vaciada, ¿y la Europa llena de turistas, dónde la dejamos? O la misma España. Vivo en una ciudad que no tiene visos de que se quede vaciada, sino llena de visitantes, que no es lo mismo, convertida en parque temático de sí misma. Es la "veneciación" de las ciudades que cometieron el pecado de ser bellas, de tener monumentos únicos y un ambiente inimitable, historia, fama, mitos, personajes legendarios. Hermosuras. En el castigo de ser tan hermosa, Venecia lleva la penitencia de que se está convirtiendo en una ciudad-museo, donde apenas va quedando población local, porque fueron arrojados del paraíso en beneficio del turismo convertido en primera industria local. Ya hace tiempo que leímos que Venecia había prohibido o iba a prohibir la escala de los barcos de cruceros, porque llenaban la ciudad de turistas que dejaban bien poco, porque volvían a comer al barco, del que traían hasta la botella de agua mineral para ir a visitar los monumentos en las horas de la escala.

Nos ha contado Ángel Gómez Fuentes una historia terrible, en la que pienso con angustia desde Sevilla, donde estamos casi a pique de este repique. El Domingo de Resurrección se juntaron en Venecia 150.000 turistas. "Teniendo en cuenta que los residentes son poco más de 50.000, la ciudad de la laguna --dice Gómez Fuentes-- se convirtió en un caos, sobre todo en el centro histórico, con una muchedumbre incontrolable". A los sevillanos nos recuerda mucho de lo que padecimos en Semana Santa y de la que nos espera en la Feria de Abril.

Ya cobraban en Venecia, que yo lo he pagado, un impuesto municipal a los visitantes mediante una cantidad que te cargaban en la factura del hotel. Pero los turistas con hotel no son problema. El problema es el turismo de día, el que duerme en Mestre, que es mucho más barato, y va a la capital de la Serenísima como de larga visita, a echar el día. El ayuntamiento, aparte de cerrar Venecia cuando ya no cabe un visitante más, como hemos leído en algunas ocasiones, ha encontrado la formula mágica para el problema. Venecia será la primera ciudad del mundo con "pay per view", donde habrá que pagar por entrar. Para mí que con toda la razón. El turista que echa el día en Venecia deja unas basuras y utiliza unos servicios municipales que han de pagar luego los residentes estables que los sufren. El alcalde va a ensayar ya este verano, para implantarla en 2023, la tasa de visita. Vamos, que cobrarán la entrada. ¿No es la ciudad un museo? Pues cobremos por entrar en el museo. Leemos: "El precio del billete de entrada dependerá de la cantidad de visitantes que haya en la ciudad. Se partirá de una tarifa mínima de 3 euros para los días en que haya pocos turistas y no haya caos en el centro histórico. Pero si una persona visita Venecia cuando se llena de gente, deberá pagar la cuota máxima, que será de 10 euros." Así que como aquello de "si quieres ver a Belmonte, date prisa antes de que lo mate un toro", si tiene intención de visitar Venecia, reserve un hotel donde no le cobran la localidad de entrada o vaya preparando esos 10 euros. Y lo malo es que aquí, a ese paso, muchas ciudades, entre ellas la mía, vamos a terminar así.

 

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