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El Recuadro

 Antonio Burgos

El Mundo de Andalucía,  jueves 29 de abril de 1999


Día de la Madre... de Edu

La mamá de Edu, con el móvil del Día de la Madre
La mamá de Edu, con el móvil del Día de la Madre

Espere usted, compadre, a ver si hago memoria sobre lo que me pregunta, que usted hace unas preguntas tela de difíciles... ¿Qué se le regalaba a las madres cuando no existían teléfonos móviles? ¿Ah, pero es que alguna vez no han existido los teléfonos móviles? ¿No fue acaso un teléfono móvil lo que usó Guzmán el Bueno para decirle al moro puñetero de la trompeta que matara a su hijo, pero que lo dejara dormir la siesta? Pregúntaselo usted a Gandía, que no me dejará por embustero. Fue cuando Guzmán le dijo al moro:

-- Si se corta, cuelga, te vuelvo a llamar, porque te estoy hablando desde lo alto de una almena y aquí en Tarifa no hay mucha cobertura...

Sin salir del tiempo de los moros, cuando San Fernando conquistó Sevilla y el rey moro Axataf se le puso doblemente genuflexo en la Puerta de Carmona, como Rivera Ordóñez a portagayola en la puerta de chiqueros, no le entregó las llaves de la ciudad, que el cuadro de Pacheco está equivocado. Le dio en bandeja de plata el Movistar del Alcázar. Un teléfono móvil usó el alcalde de Móstoles para levantar a España contra los franceses, cuando querían comprar Madrid como si fuera el Ecovol de Valentín Alvarez Vigil, y un móvil utilizó Franco para el parte de la Victoria según Triana: "Se acabó el carbón, tercer año triunfal." Si se proclamó antes la II República fue porque don Niceto Alcalá Zamora llamó a don Diego Martínez Barrios, que era mucho del tricolor Cuerpo de Telégrafos, por un teléfono móvil.

Un teléfono móvil es lo que hemos regalado siempre a las madres. Ya lo cantaba Pepe Pinto: "Madre no hay más que una, y yo le regalé un móvil". Y lo repitió Juanito Valderrama: "Como una mare no hay ná, un hijo la pone güena con una tarjeta activa que le da..." Doña Angustias, la madre de Manolete, no se separaba del móvil para oír de Camará cómo había estado el niño. Menos mal que el día de Linares tenía agotada la batería, que había hecho efecto memoria de Andalucía, y no le dieron el susto, por lo que ya pudieron hacer del tirón un hotel en la casa y los de la oposición pudieron pedir las cuentas del centenario. Si famosa es la madre de la Pantoja, no crean que es por lo que siempre cuidó a la niña, que era mocita, sino por el teléfono móvil. Pues anda que no es nadie el móvil de doña Ana...

No hay razón, pues, para preguntarse qué se le regalaba a las madres antes de los móviles, porque los móviles han existido siempre. Si se han usado tanto en la Feria de Sevilla, un poner, es porque forman parte de la tradición del festejo. Ya saben ustedes que Ybarra llamó por el móvil a Bonaplata cuando venía en el AVE de visitar a Isabel II en la Corte de los Milagros y le dijo:

-- Narciso, que he hablado con la Reina y me ha dicho que...

La pena es que Bonaplata nunca supo lo que Isabel II había dicho a Ybarra, porque en aquel momento el AVE entró en un túnel y se cortó la comunicación. Pero da lo mismo. El teléfono móvil es ahora la medalla del amor: "Hoy pago una factura de Movistar más alta que ayer, pero menos que mañana, que nos vamos a enterar cuando mamá se ponga a hablar por el móvil con las amigas, hijo..." Lo que vamos a celebrar este año no es el Día de la Madre, sino el Día de la Madre de Edu. El joío niño le ha contagiado la afición hasta a su puñetera madre...

 

 


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