El "avión invisible" americano, visto... y abatido

Veo, veo... ¿Qué ves? Un avión invisible... Si esto no fuera tan trágico y no hubiera ya en Yugoslavia mil muertos entre la población civil, sería para tirarse de risa, para darse chocazos por las esquinas. Si esto no fuera tan triste, tendríamos que reconocer que, como anda por medio el del catorceavo, les está quedando como la guerra de Miguel Gila:

-- ¿Está Solana? Que se ponga... Mire usted, don Solana, que hemos mandado el avión invisible, pero que el enemigo lo ha visto, le han aventado dos tiros y nos lo han abatido... Sí, de piloto iba Johnny, claro, como es tan gordito, por eso seguramente lo han visto. A ver si la próxima ponemos a otro que sea más delgadito y no lo ven... Y es lo que digo yo, don Solana, que llame a usted a la fabrica de aviones invisibles y pida el libro de reclamaciones, porque éstos que nos han mandado se ven bastante. No sé yo si dándoles una manita de Titanlux. así como oscurita...

Si esto no fuera tan trágico, habría que considerar que con todo su golpe de poderío y con el ardor guerrero que vibra en nuestras voces sin que hayan informado al Parlamento, estamos bombardeando humanitariamente al pueblo yugoslavo con aviones invisibles fabricados probablemente en Lepe. O diseñados por Fernando Morán. Esto de que los aviones invisibles se vean y , pum, al suelo el piloto y una peliculita de aventuras para rescatarlo, es como si los americanos formaran la cuadrilla de Los Enanitos Toreros y les saliera un "dream team" de baloncesto. Como si le entrara alopecia facial a la mujer barbuda, por no salir del circo del Pentágono. Como si el faquir tuviera que ser trasladado urgentemente a Traumatología al acostarse en su cama con colchón de puntillas.

Pero esta guerra de Gila con aviones leperos es muy triste. Tan triste que el nombre de un barco lo dice todo. Uno de los barcos americanos participantes es el USS Gonzales. Si esto no fuera tan trágico y tan triste sería para preguntar muy seriamente si acaso no le habrán puesto los americanos ese nombre al barco, mecachis en la mar, en memoria de quien nos metió de hoz y coz en la guerra del Golfo, donde nos iba y nos venía, aproximadamente, lo mismo que en la Guerra de Kosovo. Es decir, nada. Ni entonces nos consultaron ni ahora nos consultan. La única esperanza que nos queda es que los mismos que han visto el avión invisible y lo han abatido, a la hora de bombardear Rota y Morón como represalia lo hagan con cañones sin agujero. Por no salir trágicamente de la guerra de Gila.