Pedro el encargado de la Droguería de Telesforo en la Puerta del Arenal. El Bar Los Príncipes, recién cerrado. Navarrito en su alpargatería de la calle Arfe esquina a Varflora, donde ahora está Baco. Manolo el del puesto de periódicos de la Puerta del Arenal. Manfredi el sastre de los toreros en la calle Jimios. La tienda de colchones Flex en la calle García de Vinuesa. Don Francisco Lobato, el de Frigoríficos Lobato. Mercedes la de Calzadilla. Joaquín el de Antena Radio. Vicente y Eduardo el del Traga. El Valentino Bar y su legendaria puerta de comunicación directa con cierto club social. El Terrible de Dos Hermanas y su toreo de salón ante el espejo del Bar Avenida. Las colas de autobuses en la Avenida de José Antonio, los domingos a primera hora de la mañana, para salir de excursión a las playas, organizadas por Viajes Bonanza, con los viajeros con sus butacas, sombrillas y neveras para pasar el día. La llegada de los entierros de hermanos de la Santa Caridad a la parroquia del Sagrario para el responso. La secretaría del Sevilla C.F. en la calle Harinas y la del Real Betis Balompié en la calle Alemanes. Natalio el Betunero de la cafetería Las Vegas de la calle Alemanes. La reventa de entradas de toros en la Avenida atendida por El Tomatito. La tienda de máquinas de escribir de Roneo. Olmo el fotógrafo. La pensión de las Hermanas Conde en la calle Federico Sánchez Bedoya, donde vivían los futbolistas jóvenes del Betis (Antón, Dioni, Cruz, Macario, Ezequiel). Los guías turísticos de la Avenida, que invitaban a los turistas a comprar mantones en Artesanía Textil de Sánchez Bedoya. El Chato Moguer, paradigma de béticos. El conjunto musical pop "Los Escorpiones" ensayando por las tardes en la azotea de la calle Galera, 9.
El Oro Bar de la calle Puente y Pellón, de Antonio Pérez Sánchez, el primero hubo con máquina de palomitas. El puente de San Telmo cuando por la mañana no se cerraba del todo y ponían una tabla para que pasasen las cigarreras y algunos estudiantes que iban a coger el tranvía o el autobús en la Puerta Jerez. El estanco de Amparito en la calle Betis, con las cartillas de racionamiento de tabaco. La panadería del Nene en la calle Pureza. El bar Aurelio, con una gran variedad de tapas, en calle Pureza. La Casa de Zeppelín el de las bicicletas, donde la gente se reunía para oír las ocurrencias ciclistas del dueño. Ver las corridas de toros televisadas en la Peña Trianera, donde el que menos sabía de toros era porque había sido picador o banderillero.
Antonio Garduño entrenando en el patio del cine La Estrella. Las películas de Bob Steele en el infantil del Cine Rocío. Los canutos para tirar huesos de armeses. Las espaditas a real. La caña de azúcar, las algarrobas y los cigarros de matalahúva del kiosco de Trini. El Cara al Sol en el patio del colegio. Julio, borracho, gritando en la entrada de los corrales y casas de vecinos: "¿Hasta cuándo...?" (por Franco). El Sanlúcar bailando con una botella en la cabeza. El Pintillo con su traje y sus perros. Manolito El Rubio en la rebotica de don Aurelio Murillo. Silvestre y El Loqui de Triana mano a mano en el toreo. Los veladores del bar de los toreros en el Altozano. Los tres hermanos de "Los Dos Hermanos". Los pavías de Enrique en la calle San Jacinto. "Un buen sastre, Astoria, Pureza, 45". Los Caminos de Triana. Los Leones. Marina Bonilla haciendo letras de soleares y abanicos de papel en su tienda. Bonilla, Cónsul de Triana en Er 77. Las camas turcas. El montoncito de tebeos en el centro de la mesa del comedor para la lectura familiar. Los capítulos de "Diego Valor" y de "Dos hombres buenos" en la radio. La cuña de chocolate en el desayuno. La barbería del Jorobao. Rodrigo de Triana "el comunista". El Rubio José cantando en la bodeguita El Pío. Julio, el corneta de la banda de la Cruz Roja. (Redactado con recuerdos enviados por los lectores al correo: [email protected])



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