Chaves, solución para la bicefalia
El muy machadiano Partido
Socialista ha enmendado la plana a su maestro Antonio Machado. Machado dijo que "de
cada tres cabezas, dos embisten y una piensa". Con ese harakiri en forma de
elecciones primarias que se hicieron, han demostrado que pueden mejorar ampliamente a
Machado: "De cada dos cabezas, una embiste... y otra también". Meten bien la
cara estos candidatos cuando se embisten entre sí. Y ya que estamos con lo de embestir,
nada más taurino que Borrell, émulo de Luis Miguel Dominguín, cuando en Las Ventas
levantó el dedo índice para decir que era el número 1, lo que seguimos viendo hasta en
su hijo Miguel Bosé. Ocurre, empero, que de la solemnidad de un Dominguín de primera o
segunda generación levantando el dedo para decir que es el número uno, a un Borrelín
diciendo, una y otra vez, "oiga, que el líder soy yo" media el abismo que va de
lo sublime a lo ridículo.
No sé por qué se calientan
tanto la cabeza con el problema de las dos cabezas, la cefalalgia de la bicefalia. Las
primarias fueron el parto de los montes, donde nació no un ratón, sino un gato con dos
cabezas. Partido de barraca de feria, porque enseñan gatos con dos cabezas. Cuando en los
barones, como se ha dicho, está la solución. La solución no por donde pretenden, la
solución machadiana, que intenta que Borrell sea la cabeza que embiste y Almunia, la
cabeza que piensa. No. La solución es de un solo barón y de una sola cabeza. La
solución no es Bono, microcéfalo, ni es Rodríguez Ibarra, cabeza loca. La solución es
Chaves. Una buena cabeza, como la de Chaves, vale por dos. Por eso el PSOE no tiene
problemas de bicefalia en Andalucía, porque como al otro le cabía el Estado en la
cabeza, a Chaves le cabe en el cabezón la cabeza de Borrell y la cabeza de Almunia.
Estamos en la Cultura
de la Bonanza
Ahora sí que a España no la
conoce ni la madre que la parió. Villalonga reparte a los accionistas de Telefónica
chocolatinas, bombones y caramelos. A Javier Arenas le sale en la última EPA que ha
creado en un año 464.000 empleos, que son nada menos que la mitad de los famosos 800.000
puestos de trabajo que prometió el PSOE. Como han dejado de meter la mano en el cajón y
de decir que oído, cocina, que sean dos mil millones de fondos reservados, Rodrigo Rato
puede anunciar que han recortado el déficit publico en un 76 por ciento, que ¿saben
ustedes cuánto es? Pues una barbaridad. No sé si los criterios de convergencia, pero un
León de Oro en Venecia y una Palma de Oro en Berlín sí que conseguía Rato si se
presentara con esta película económica en esos festivales, porque les está saliendo de
cine. No solamente han recortado aquella forma tan moderna y progresista que tenían los
otros de despilfarrar el dinero público, sino que han dejado de meter la mano no sólo en
el cajón público, sino en el sobre privado de la paga del día 30 de los contribuyentes,
que cuando les rebajen las retenciones del IRPF como anuncian y cojan la primera nómina
con más dinerito contante, invertible y ahorrable, van a pegar un salto que van a llegar
donde Pedro Duque, por lo menos.
Y haciéndolo de cine, son los
malos de la película, por lo mal que cuentan todo esto. El problema no era Rodríguez ni
el problema es Piqué. El problema es de nombre. Cuando la Cultura del Pelotazo, todos
sabíamos que estábamos instalados en ella. Ahora nadie sabe que está en la Cultura de
la Bonanza. Como me lo huelo, lo digo y les doy hecho el rótulo. Y "sin
trincá", como marca la Cultura de la Bonanza...
La ETA lo que necesita
es amor
Lástima que se haya ido
Jesús Puente de "Lo que necesitas es amor". Bastaba un recorrido de su caravana
por las cárceles para solucionar la aproximación (y centena) de los presos etarras a su
vascongada tierra. Sí, ya sé que hay ahora un muchacho haciendo el programa, pero no es
lo mismo. Lo que ha ocurrido en el penal del Puerto 2 ha sido estrictamente de Jesús
Puente. El amor mueve montañas y mueve políticas penitenciarias, que pesan más, o que
se lo pregunten, si no, a Jaime Mayor Oreja, que la tiene que coger en peso.
En ese penal del Puerto, como
en una copla de "La niña de mis ojos", estaba el preso etarra Juan Ramón Rojo
González, que me encantan esos nombres tan vasquísimos que tienen algunos presos
etarras, no les Kepa (Aulestia) la menor duda. Juan Ramón se enamoró de la psicóloga de
la cárcel, y la requebró de amores. La psicóloga le hizo caso a sus batallas de amor,
que buscaba campos de pluma. Como no los hallaron, se conformaron con el beso, traduciendo
al euskera lo de "el beso, el beso en España", que como ustedes saben se debe
cantar "el beso en el Estado español". Y era de tornillo el beso que estaba
dando el enamorado a la psicóloga, en el romance de la forzada reja, cuando los pillaron.
Dios, la que se armó... Psicóloga suspendida de empleo y sueldo y preso trasladado
forzoso. ¿Saben a dónde? Pues al País Vasco. Luego aquí tiene Mayor Oreja la solución
al problema de la aproximación. Basta que todos los presos etarras de todas las cárceles
se enamoren de todas las psicólogas y que las besen a todas con besos de pasión. Tras lo
cual, serán todos inmediatamente trasladados, como castigo, al País Vasco. El problema
de la ETA lo que necesita es amor.