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Pedro Duque y los astronautas del
"Discovery", en el patio de los Leones de la Alhambra de Granada |
Usando el
recuadro como telegrama o como correo electrónico, que es lo que el consejero más bien
gasta, le dije aquí una vez a Pepe Nuñez que la Consejería de Turismo le tenía que
mandar un pavo a Bill Clinton por Navidad. Como mandar un pavo hasta la Casa Blanca es un
lío, entre los permisos de Sanidad y lo que cobran DHL o MRW por llevar un pavo, como
cosarios de Washington por lo moderno que en realidad son, el consejero de Turismo me
tomó la palabra, pero no el concepto. Y le cambió a Clinton el pavo bueno y hermoso de
la Sierra, de Guadalcanal, de la tierra de su suegro el notario don Pedro Porras Ibáñez,
por una medallita. Pero no una medallita de la Virgen del Rocío, que le hubiera hecho
más falta a Clinton con la que se le avecinaba con la Lewinski, sino una medallita en la
anual tómbola de distinciones turísticas. Así le fue al presidente de los Estados
Unidos, que como las medallas de la Consejerìa de Turismo no son milagrosas, pues ahí lo
tienen, a pique de un repique de darle el canuto de la absoluta.
Usando otra vez el recuadro
como el correo electrónico que Nuñez lee desde su coche, vía teléfono de Edu, con el
ordenador portátil y el Internet de carretera, propongo ahora en tiempo y forma al
excelentísimo señor consejero de Turismo que inicie el correspondiente expediente de
cara a la Presidencia de la Junta o departamento que corresponda, para que en el próximo
28 de febrero, día de nuestra tierra, le sea concedida oficialmente a Clinton la Medalla
de Andalucía. Y espero que, a la rastra, don Kiki Díaz Berbel lo haga por lo menos hijo
adoptivo de Granada. Lo digo por los astronautas en el mirador de Nicolás del Albaicín,
contemplando la que ya se conoce en todo el mundo como "la puesta de sol de
Clinton", lo digo por Pedro Duque y sus compañeros de montarse en los cacharritos
espaciales degustando la gastronomía andaluza, durmiendo en granadinas camas. ¿Cuántas
horas de telediarios en todo el mundo sumó Clinton cuando vino a ver la puesta de sol?
¿Cuántos kilómetros cuadrados de fotos de los astronautas retratados en el Patio de los
Leones de la Alhambra han salido en los periódicos del mundo? ¿Cuántas veces se han
dicho por las radios de la Humanidad las palabras Andalucía, Granada, puesta de sol,
Albaicín, Alhambra... Don José Nuñez, que sabe lo que vale un peine de una campaña
de promoción turística de Andalucía medio en condiciones, ¿le ha metido el lápiz a
esta propaganda gratuita que Clinton y los astronautas americanos están haciendo de las
excelencias de nuestra primera industria, como es el turismo?
Lo más bonito es que Clinton
es ya un agente turístico de Granada. Mundicolor y la Cook lo pueden acusar de
intrusismo. Ya saben que la visita de los astronautas responde a su comentario, cuando los
recibió tras el viaje, estaban contando al presidente las puestas de sol vistas desde el
Discovery y Clinton les dijo:
--- Las puestas de sol desde
el Discovery son una mierda pinchá en un palo al lado de los atardeceres de
Granada. Tenéis que ir...
Clinton es ya el Señor Luque
de los atardeceres granadinos: "Pruebe, compare y si encuentra otra puesta de sol
mejor..." Por eso se ha ganado a pulso la medalla de oro de Andalucía". Como
que creo que, a la antigua usanza, en el Mirador de San Nicolás van a poner un escudo de
los Estados Unidos, con un letrero que diga: "Proveedores de puestas de sol de la
Presidencia de los Estados Unidos". In Clinton we trust...
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