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Como el BCH con el Santander, Arzalluz se ha
fusionado con Garaicoechea |
Hasta ahora, escribía estos artículos en un ordenador Dell. Sin mover un
dedo, a partir de ahora estaré pegándole teclazos en un cacharro de la casa IBM, ésa
que permite que muchos digan que su mujer los tiene colocados de IBM: " Y véme
al supermercado, y véme a pedir número en el ambulatorio..." Las fusiones,
textualmente, se nos cuelan hasta en el escritorio. Yo antes tenía cuatro perritas en el
Banco Hispano Americano. Sin que nadie me lo consultara, me encontré con que me las
habían cambiado al Banco Central Hispano. Me había hecho a la idea, y hasta había
aprendido a decir BCH, cuando resulta que ahora tengo los números rojos en el Banco
Santander Central Hispano. Si me hubieran dado por lo menos las ventajas fiscales que los
dueños de los bancos han gozado cada vez que han cambiado de nombre el sitio donde tenía
mis jayares, no estaría escribiendo este artículo, porque a estas horas estaba ya
tumbado en las Bahamas, con la piña colada y la mulata abanicándome.
Nos dijeron que esto de Europa y del libre
mercado era la mar de bueno porque la competencia abarata los precios y aumenta las
calidades, y de momento lo único que sabemos es que nosotros seguimos teniendo las mismas
trampas y sufriendo los mismos virtuales monopolios... pero con más empresas fusionadas.
Si cada vez que se fusionaran dos cajas de ahorros convidaran a pago de hipoteca, la cosa
tendría explicación. Aquí nos pasamos media vida leyendo el libro de Ramón Tamames
para enterarnos de los latifundios y de la lista de terratenientes, y resulta que están
haciendo un inmenso latifundio de la economía española, en manos cada vez de menos
terratenientes. Las tierras que tiene la Casa de Alba son nada, tres macetas de albahaca,
al lado de los latifundios empresariales de la Casa de Botín, y encima a don Emilio no le
ponen las orejas coloradas cuando trinca la tela marinera de las mamelas de los beneficios
de las ventajas fiscales de la fusión, que me han dicho que las ha mangado y a base de
bien por llevarse mis cuatro perras del BCH al BSCH sin que a mí me dé ni un duro, qué
tío más rácano y más egoísta... Mientras que a la pobre de Cayetana me la tienen
pregonadita por las subvenciones europeas al girasol y otras ordinarieces.
Según mis cálculos, esto va camino de que
España entera sea propiedad de una sola empresa. La Europa del siglo XXI nos lleva camino
del feudalismo. Villalonga el de Telefónica, si no es ya señor de horca y cuchillo, poco
le falta; de ahí que ejerza el derecho de pernada sobre los medios de comunicación.
Dentro de nada, Movistar absorberá a Airtel y todos comunicando. Como la Seat es ya
Volswagen, Suchard es ya Jacob, y la Volvo yo ya no sé de quién puñetas es, qué lío
de fusiones, Dios mío de mi alma, me han fusionado todo. Estos son los fusionamientos de
la Moncloa. Acabarán a esta paso hasta con los duales españoles. Se acabó la España de
Joselito y Belmonte. Si vivieran ahora, a los dos los habría comprado un banco y ya
haría tres temporadas que los fusionaron. De todo lo cual se infiere que el apañete
electoral a Arzalluz y Garaicoechea no es otra cosa que el signo de los tiempos. Luego
fusionarán directamente al PNV con la ETA, y listos...
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